Los fondos de inversión españoles cierran el año en negativo, con una variación patrimonial del -3,6% debido al efecto mercado, pero con unos flujos positivos de enero a diciembre de casi 17.000 millones de euros, según los datos provisionales de Inverco. Son la cara y la cruz de un 2022 marcado por las caídas en las plazas financieras debido a la guerra de Ucrania y a una inflación desbocada que ha impulsado la palanca restrictiva de los bancos centrales, pero también en el que los inversores han seguido mostrando confianza en estos vehículos.
Ya lo explica Inverco en su último informe: ha sido la incertidumbre que ha protagonizado el comportamiento de los mercados durante 2022 la que ha generado esa reducción en el volumen de activos del 3,6% para el total del año, en el que el patrimonio de los fondos se ha situado algo por encima de los 306.000 millones de euros.
En sentido contrario, el ahorro nuevo acumulado en fondos en el conjunto del año aumenta hasta los casi 17.000 millones de euros. Es el décimo año en el que de forma consecutiva los fondos domésticos registran entradas netas. En estos últimos diez años, el volumen de suscripciones netas que han experimentado estos vehículos nacionales supera los 172.000 millones de euros.
Siguen los flujos positivos
En diciembre, siguió esta tendencia de suscripciones. Los fondos registraron captaciones netas muy positivas, de casi 1.400 millones de euros en el último mes del año, por lo que las suscripciones netas para el conjunto de 2022 superan los 16.500 millones.
Sólo en el último trimestre, de septiembre a diciembre, las adquisiciones netas por parte de los ahorradores en fondos superaron los 7.500 millones de euros, convirtiéndose en el mejor trimestre de los últimos 20.
En diciembre, los garantizados, los de renta fija y los de gestión pasiva fueron los que centraron el interés del partícipe (más de 1.800 millones de euros en su conjunto). También los fondos monetarios registraron flujos de entrada positivos (55 millones de euros).
En el conjunto de 2022, los fondos de renta fija cierran el año con casi 15.000 millones de euros de suscripciones netas, correspondiendo exclusivamente a los fondos de renta fija a largo plazo. También los fondos de rentabilidad objetivo y los fondos garantizados han acumulado en el conjunto de 2022 notables suscripciones netas, en un entorno de tipos de interés positivos, que han generado atractivo para los partícipes de perfil más conservador.
Un ajuste debido a los mercados
En el último mes, sin embargo, siguió el ajuste patrimonial por culpa de los mercados: los fondos cerraron con una caída del 1,4% en su volumen de activos. Así, en términos de rentabilidad, los fondos experimentaron en diciembre una rentabilidad media negativa del 1,66%, donde la práctica totalidad de las vocaciones obtuvieron números rojos. Aquellas que ofrecieron peor rentabilidad fueron las que tenían mayor exposición a acciones. También la renta fija experimentó retrocesos, que en el caso de la de largo plazo alcanzó casi el 1% solo en diciembre.
En el conjunto del año, la rentabilidad de los fondos es negativa en un 8,4%.