El último informe publicado por Preqin, Women in Alternatives 2022, muestra que los años de pandemia no han rebajado la presencia de la mujer en la industria de activos alternativos, pero tampoco han mejorado mucho el marcado desequilibrio de género que existe en esta parte de la industria de inversión. Según denuncia, las mujeres ocupan solo el 12,9% de los puestos senior o de responsabilidad.
En la industria de activos alternativos, el “equilibrio de género” continúa dando pasos aunque de forma lenta. Según Deloitte, la falta de mujeres en puestos de liderazgo puede afectar negativamente a la promoción de las mujeres dentro de un sector. De hecho, la consultora estima que la referencia de tener una mujer en la dirección ejecutiva, podría impulsar el ascenso de, al menos, tres mujeres para puestos de alta dirección. Los datos de Preqin muestran que el 12,9 % de los puestos de responsabilidad en el sector de alternativos están ocupados por mujeres. En enero de 2022, el 20,9% de la “mano de obra” relacionada con la gestión de activos alternativos era femenina, y si se considera sólo a los inversores, esta cifra se eleva al 24,2%, frente al 20,3% y el 24,0%, respectivamente, del año anterior.
Si se observa la representación femenina en las diferentes clases de activos, a nivel regional, los gestores de fondos de deuda privada europeos son los que más mujeres emplean, pasando del 21,6% en 2021 al 22,8% este año. Los gestores de fondos inmobiliarios del resto del mundo son los que tienen la menor proporción de mujeres en su plantilla: del 17,3% en 2021 al 15,1% en 2022. “En cuanto a las clases de activos, las infraestructuras están a la cabeza, con un 28,6% de mujeres en plantilla, frente al 24,1% global; y los fondos de capital riesgo van a la zaga, con un 23,6% de mujeres en Norteamérica y un 21,9% a nivel global”, apunta Preqin entre sus conclusiones.
En febrero de 2022, solo el 20,5% de los empleados de los gestores de fondos de capital riesgo eran mujeres, según el informe de Preqin. Mientras que esa proporción ha aumentado durante los últimos tres años en Norteamérica, Europa y Asia -aunque en menos de un punto porcentual anual-, en el resto del mundo se registró un descenso del 18,9% en 2020 al 18,3% en 2021. Según el documento, en los niveles superiores, hay aún menos mujeres: solo el 9% de los directores generales y el 8,2% de los miembros de los consejos de administración son mujeres.
Infrarrepresentadas en los puestos directivos de los mercados privados
Entre las conclusiones que arroja el informe, destaca que las mujeres siguen estando infrarrepresentadas en toda la plantilla de los servicios financieros. Deloitte estima que en 2021 el 24% de los puestos de responsabilidad estaban ocupados por mujeres en los servicios financieros. En los activos alternativos, las cifras son aún peores, ya que los datos de Preqin muestran que solo el 12,9% de los puestos directivos están ocupados por mujeres.
A nivel de gestoras de fondos, la proporción de mujeres en la plantilla oscila entre el 18,9% de las empresas inmobiliarias y el 21,1% de las empresas de capital riesgo, deuda privada y recursos naturales. La proporción de mujeres en puestos directivos oscila entre el 13%, en el capital riesgo, y sólo el 9,8% en el sector inmobiliario. “Curiosamente, el sector inmobiliario cuenta con la mayor proporción de mujeres empleadas en el nivel junior (36,3%), lo que hace que la caída entre el nivel junior y el senior sea aún más pronunciada”, matizan desde Preqin.
El capital riesgo va por delante
Un aspecto positivo es que las mujeres han tenido más éxito en el lanzamiento y la gestión de fondos de capital riesgo que en cualquier otra clase de activos alternativos. Según indican, el número de fondos de propiedad femenina que han cerrado por primera vez ha pasado de 32 en 2013 a 158 en 2022, lo que supone un aumento de casi el 400% en una década, que es considerablemente más rápido que en el capital riesgo (donde el aumento fue del 32,1%), y en el sector inmobiliario (133,3%) – las únicas otras clases de activos donde el número de primeros cierres para 2022 es de dos dígitos.
Además, las start ups fundadas por mujeres y respaldadas por fondos de capital riesgo recaudaron una media de 935.000 dólares (frente a las fundadas por hombres: 2,1 millones) y generaron 730.000 dólares de ingresos (hombres: 660.000)”, añaden.
En este sentido, y según un estudio realizado por Boston Consulting Group y MassChallenge, las empresas de nueva creación con al menos una fundadora mujer recaudaron menos dinero que las que tenían fundadores hombres, pero generaron más ingresos durante un periodo de cinco años. “El mismo estudio descubrió que, expresado en ingresos por dólar invertido, las empresas de nueva creación fundadas por mujeres y respaldadas por capital riesgo superaban a sus homólogas fundadas por hombres por un margen considerable, con un rendimiento de 78 céntimos por dólar, frente a los 31 céntimos de las empresas con fundadores masculinos”, destacan desde Preqin.
Sobre las conclusiones de su último documento, Jaclyn Bouchard, vicepresidenta ejecutiva y responsable de soluciones ESG y responsabilidad corporativa de Preqin, ha señalado: “Hasta que las mujeres estén mejor representadas en los niveles más altos del sector de las alternativas, el progreso será lento. Sin embargo, si se combinan con acciones como la ampliación de la red de contratación de mujeres en puestos inferiores, el desarrollo de métricas para seguir el progreso y la incorporación de métricas de diversidad de género en los procedimientos de diligencia debida, se puede lograr un cambio real. Como mujer que ocupa un puesto ejecutivo en Preqin, también conozco la importancia de ser mentora de otras personas y la inspiración que puede suponer el mero hecho de estar donde estoy: con un asiento en la mesa de los altos cargos de la empresa”.