Aunque la estructura del ahorro financiero de las familias en España sigue estando muy concentrada en los depósitos, las Instituciones de Inversión Colectiva (fondos de inversión nacionales, sociedades de inversión e IICs extranjeras) ya representan el 14% del total de dicho ahorro, según datos del Observatorio Inverco. Además, el número de cuentas de partícipes se situó a finales de 2019 en 11,7 millones, lo que supone un 4,1% más que en 2018.
Este dato supone un nuevo máximo histórico, si bien los depósitos bancarios (incluyendo también el efectivo) continúan representando el 38% del total de ahorro de los hogares, a pesar de su escasa remuneración, por los bajos tipos de interés vigentes en la zona euro desde hace varios años. Sobre cómo se distribuyó está inversión, el documento de Inverco señala que, en 2019, el ahorro de los partícipes en fondos de renta variable alcanzó el 15% del total del patrimonio. Asimismo, los fondos mixtos engloban el 46% del patrimonio, mientras monetarios y renta fija suponen el 27% del total. El informe de Inverco, realizado a partir de la información proporcionada por las sociedades gestoras de fondos de inversión nacionales a cierre de 2019, señala que los fondos garantizados reducen su ponderación hasta el 11,4% del ahorro.
Además, en 2019, el patrimonio invertido en fondos de inversión registró un aumento del 7,4% respecto al año anterior, superando la cifra más alta de la serie histórica a final de ejercicio. Asimismo, Madrid, Barcelona, Vizcaya, Valencia y Guipúzcoa concentran más del 50% del ahorro total nacional en fondos de inversión, mientras que Galicia, Andalucía y Castilla y León destacan como las comunidades que registran crecimientos iguales o superiores al 10%.
“Tras varios ejercicios de crecimiento continuo, los fondos de inversión se han alzado como un instrumento de referencia en el ahorro de las familias. El positivo aumento de la cultura financiera del ahorrador español, promovido por las distintas iniciativas que han puesto en marcha las entidades con el fin de impulsar el conocimiento financiero en el país, ha potenciado la figura de los fondos como vehículo de ahorro, favoreciendo así su crecimiento y fomentando la inversión a medio y largo plazo y la diversificación de sus carteras”, asegura José Luis Manrique, director de Estudios del Observatorio Inverco.
Por otro lado, los depósitos bancarios se mantienen como el vehículo de ahorro preferido por las familias españolas, representando el 38% del ahorro. No obstante, el informe también destaca el peso de las instituciones de inversión colectiva, que ya representan un total del 14% de este ahorro. Los fondos de inversión domésticos ascienden al 9,5%. En este escenario, y a pesar del incremento en el volumen total de depósitos, los fondos de inversión registraron un mayor crecimiento, y la ratio fondos/depósitos alcanza ya el 23,6%, más del doble de lo que representaba en 2012 (11,4%).
Navarra, La Rioja, Aragón y País Vasco destacan por ser las comunidades autónomas que se encuentran muy por encima de la media nacional. Mientras que en las tres primeras los fondos representan más del 40% del total de sus depósitos, en el País Vasco esta ratio se sitúa en el 36%. En seis provincias españolas esta relación supera el 40%, siendo Teruel la provincia con el mayor porcentaje (49,5%) en la que sus partícipes ya invierten en fondos casi la mitad de lo que ahorran en cuentas y depósitos.
En cuanto al perfil inversor, el informe asegura que los partícipes continuaron canalizando sus carteras hacia posiciones más dinámicas. Madrid, Cataluña, País Vasco y Navarra han sido las comunidades con mayor patrimonio en renta variable. Mientras, Galicia e Islas Baleares se sitúan como las comunidades que más invierten en fondos monetarios y de renta fija, Melilla en mixtos/retorno absoluto y Asturias en garantizados.