Pese a haber sido un año complejo para la industria de inversión, las gestoras internacionales consideran que el mercado nacional sigue siendo atractivo y que ha llegado el momento de que su apuesta por la digitalización, la sostenibilidad y por poner al cliente en el centro brille con luz propia en este nuevo contexto de mercado en el que estamos ya embarcados.
“En los mercados, hemos llegado al fin de la fiesta. Nos habíamos acostumbrado a nada de volatilidad y a un riesgo bajo, pero este escenario ha cambiado y las oportunidades que habían desaparecido vuelven a estar sobre la mesa, como por ejemplo ha ocurrido con la renta fija”, advertía Mariano Arenillas, director general de DWS Internacional para España, durante el panel que cerró el XII Encuentro Nacional de la Inversión Colectiva, organizado por Deloitte, APD e Inverco.
Durante esta mesa redonda, las gestoras internacionales dieron su visión sobre el negocio de la industria de fondos en España dejando claro, tal y como indicó Gonzalo Rengifo, director general de Pictet Asset Management, que no se puede entender el sector sin ser consciente del cambio de paradigma que se ha producido a nivel global. “Venimos de diez años sin tipos de interés, sin inflación y con los bancos centrales llevando al mercado y al inversor de la mano. Debemos hacer un ejercicio de reflexión con el inversor para que comprenda el cambio de paradigma que supone un entorno con alta inflación, subida de tipos de interés y mayor volatilidad. En este sentido, la forma en que trabajamos, cómo aporta valor añadido la gestión activa, las soluciones de inversión y el asesoramiento serán fundamentales para que el inversor, nuestro cliente, no pierda el horizonte del largo plazo”, argumentaba.
En opinión de Gabriel Ximénez de Embún, director general de Credit Suisse Gestión, el reto que tienen por delante es dar respuesta a un inversor que está viendo rentabilidades pobres y una gran tensión geopolítica. “Será clave conseguir que los inversores no capitulen en el medio-corto plazo y se salgan del mercado. Hay que evitar que se salgan porque luego encontrar un punto de entrada será complejo. En este sentido, otro reto al que nos enfrentamos es que opten por irse a depósitos, y por ello creemos que la gestión activa y productos como los fondos mixtos flexibles pueden ser buenas soluciones que ofrecerles”, añadía Ximénez de Embún.
Este nuevo paradigma y los retos que derivan de él no quita para que las gestoras internacionales siguen considerando que el negocio de la industria de inversión en España tenga buenas perspectivas. “Si analizamos los últimos tres años, considero que la industria está sana y que va a seguir habiendo crecimiento porque todavía hay mucho ahorro en cuentas corrientes. Además, en este tiempo, los asesores han hecho un gran trabajo y eso se ha traducido en que la gente es consciente de que si quiere evitar la inflación, necesita invertir a largo plazo”, destacaba Sol Hurtado de Mendoza, directora general de BNP Paribas AM.
A la hora de hablar de tendencias que seguirán marcando la industria nacional, los responsables de las gestoras internacionales coinciden: asesoramiento, gestión activa y gestión discrecional. “El asesoramiento y la gestión discrecional van a seguir creciendo fuertemente. No es una gran noticia para las firmas locales, pero sí una realidad que nos ha traído este nuevo contexto de mercado”, afirmaba Ximénez de Embún.
Sobre esta primera valoración del negocio en España, Juan Luis Alejo, director general de Andbank Wealth Management, señaló que la ESG, el tsunami regulatorio y las operaciones corporativas seguirán siendo vías de crecimiento para las firmas de inversión. “Estamos ante un mapa muy rico de jugadores y, a nivel global, seguiremos viendo movimientos corporativos. Si miramos lo local, creo que habrá nuevos proyectos alrededor del talento nacional o del volumen, y alianzas estratégicas con family offices. Otra tendencia que continuará será la entrada de capital riesgo para añadir valor a las compañías de inversión”, explicaba.
En este sentido, Arenillas reconocía que los márgenes en la industria siguen estrechándose, ante lo cual las firmas han optado por ganar tamaño para ser más efectivos o especializarse. Dos tendencias que prevé continúe dándose. “Hay espacio para diferentes modelos de negocio. Además, creo que los cambios regulatorios pueden ser un catalizador para los movimientos corporativos, tanto operaciones de consolidación como joint-venture entre firmas que no sean competencia directa”, apuntaba.
Para Rengifo un claro ejemplo de que la interacción entre las firmas nacionales e internacionales está favoreciendo al crecimiento de la industria de fondos en España es el intercambio de know-how que se ha generado en los últimos años. Según señalaba, “el nivel de asesoramiento y madurez del sector en la última década se debe, en parte, al trasvase de conocimiento, experiencia y talento entre la industria nacional e internacional. En España hay una industria con gran talento, aunque hemos perdido la oportunidad de convertir al país en el hub de ahorro latinoamericano y tener mayor peso frente a Luxemburgo”.