En un momento en el arrecia de nuevo el debate entre la gestión activa y la pasiva han llegado los datos y dan cierta ventaja a los stock pickers de los fondos sobre aquellas estrategias que sólo replican la evolución de un índice.
Según un estudio de Morningstar del que se hacía ayer eco The Wall Street Journal, hasta finales de abril, los fondos de renta variable estadounidense manejados activamente subieron un 2,25% frente al 2,2% de las estrategias que replican los índices. Durante el mismo período el S&P 500 ganó un 1,9%.
Una pequeña diferencia que decanta la balanza hacia la gestión activa. Los fund managers, que durante mucho tiempo dominaron el negocio, han ido perdiendo terreno frente los fondos referenciados a índices en EE.UU. debido a los menores costes, pero sobre todo desde la crisis financiera. “La reciente desaceleración de las bolsas ha dado a los stock pickers de la vieja escuela más posibilidades de brillar”, estima el diario financiero en su páginas.
El coste medio de la gestión activa en Estados Unidos es del 1,24%, es de ir, 124 dólares al año por cada 10.000 dólares invertidos, según el mismo estudio de Morningstar. Sin embargo, el coste medio del fondo referenciado a un índice es de 73 dólares por cada 10.000 dólares.
“Las estrategias de gestión pasiva pueden cobrar comisiones más bajas porque no necesitan analizar compañías individuales, y las participaciones estables de sus portfolios tienen costes de negociación bajos”, explica The Wall Street Journal. Fue Vanguard Group la primera gestora en lanzar, en 1975, un fondo referenciado a un índice para inversores individuales.
Buenos resultados en las bolsas
Otra de las razones que podrían estar detrás del éxodo de gestión activa a gestión pasiva que sufre la industria desde 2008 es que «en los últimos cinco o seis años, hemos tenido un mercado alcista en el que todo ha subido«, explica Tom Joyce, portavoz de American Funds, en declaraciones recogidas por el diario. «Las las estrategias indexadas tienden a desempeñarse bien en ese ambiente».
Por su parte, el CIO de Vanguard, Tim Buckley, declaró que la firma espera que los flujos hacia los fondos de gestión pasiva se «frenen ligeramente» con el tiempo, pero la tendencia «no se va revertir».
En el otro lado de la balanza, un reciente análisis Harris Associates, gestora especializada en bolsa de Natixis GAM, recordaba que en mayo pasado, el gobierno del Reino Unido propuso que casi la mitad de los 179.000 millones de libras en activos de los fondos de pensiones de las autoridades locales se migraran a títulos pasivos que replican índices. En tanto, otros grupos inversores importantes están revisando sus estrategias activas para ver si se adaptan a este fin. El fondo soberano de Noruega (SWF), por ejemplo, designó a un grupo externo de expertos para revisar la gestión de las inversiones activas del Fondo de Pensiones Gubernamental y concluyó el año pasado que el portfolio debe operarse con un menor margen de error versus su índice de referencia (tracking error).