“El mundo está pasando por un momento en que la industria se consolida y ofrecer una plataforma común más sólida con una empresa abierta a bolsa en Estados Unidos es claramente una forma para proyectar lo de los últimos 28 años y seguir”. Esas fueron algunas de las palabras con las que Jaime de la Barra, uno de los socios fundadores de Compass, se refirió a la fusión entre su firma y la brasileña Vinci Partners, anunciada hace unos días.
Y es que la consolidación es “una tendencia que está en curso”, según detalló el ejecutivo, también vicepresidente ejecutivo y Chief Investment Strategist de la firma de matriz chilena. A nivel regional y global, está viendo a los gestores de activos unir fuerzas y espera que el movimiento siga a futuro, indicó en conversación con Funds Society.
Por el momento, las prioridades de Compass y Vinci para su integración son identificar “las potencialidades que se pueden acelerar en esta combinación” –proceso apoyado por una consultora contratada– y buscar “cómo integrar las dos compañías manteniendo lo mejor de cada una”, manteniendo las marcas donde son más fuertes.
Pero más allá del proceso de las dos firmas latinoamericanas, De la Barra identifica la consolidación en la industria como una tendencia de escala global. El histórico ejecutivo describe cómo ha visto a compañías que se dedicaban a los fondos tradicionales han ido expandiéndose a los ETF y a activos privados, como infraestructura y private equity.
“Eso refleja una tendencia global a la necesidad de reforzar estas plataformas y de responder a los desafíos de comisiones que bajan, de mercados que se globalizan, de necesidades de también responder a la regulación”, explica.
Para el profesional, esta tendencia se ve alimentada por el lado de la oferta, aprovechando las sinergias en capacidades de inversión y distribución, y por el de la demanda, con clientes que prefieren recurrir a un solo actor. “Son las dos cosas”, agrega, ya que “hay una tendencia hacia racionalizar, por decirlo así, las relaciones que tienen con sus proveedores”.
Esto les permite a las firmas del sector tener un mejor servicio, mejores precios, mejores condiciones y proveedores más fuertes y robustos. Por el otro lado, comenta De la Barra, “a las empresas les permite enfrentar ese desafío de una forma más adecuada”.
En la región
El ejecutivo de Compass espera que la tendencia mantenga su curso, incluso en América Latina, donde se ha visto “algo” de consolidación. “Creo que va a seguir”, comenta.
Esto incluye a Brasil, un mercado que ha dejado a más de un gestor latinoamericano con la sensación de que “Brasil es para los brasileños”, tanto a nivel de inversionistas como de oferentes de productos financieros. Además de la reciente operación de Compass con Vinci, otros actores paulistas han estado mirando más allá de las fronteras del país, como la gigante de alternativos Patria Investments.
Para De la Barra, la operación con Vinci da cuenta de que los brasileños están mirando al resto de la región para estrechar lazos. “La internacionalización de las empresas brasileñas ya lleva un buen tiempo”, indica, en distintos sectores.
En esa línea, mira con buenos ojos la alianza con Vinci. “Ellos de cierta forma mostraron un camino de globalización de las empresas brasileñas que es muy auspicioso y nosotros estamos muy contentos de unirnos a una empresa brasileña que tiene una afinidad cultural y una complementariedad de negocios fenomenal”, comenta.
La industria a futuro
Si bien algunos ven que el futuro de la industria de la gestión de activos decantará en un ecosistema de grandes gestoras distribuidoras tipo supermercado y un batallón de pequeñas boutiques especializadas, la visión de Jaime de la Barra es distinta.
Para el fundador de Compass, el futuro de la industria están en grandes empresas que van incorporando inversiones tradicionales, alternativas y soluciones pasivas a su paraguas. Las firmas, explica el profesional, “se van a ir adaptando cada vez más para ser una casa común de equipos que tienen especialidades muy grandes”.
Este modelo, acota, combina “la fortaleza de una gran casa, con todo lo que tiene que ver con funciones de apoyo, y la especialización, el foco y el conocimiento de estas boutiques”.
Este escenario, en que las casas de inversiones unen fuerzas o casas más grandes absorben a equipos más especializados, es lo que ven por delante. “Es como se está viendo el camino hoy y donde creo que va a seguir adelante”, indica.