Los inversores demandan, más que nunca, mayores niveles de transparencia, quieren gestores de patrimonio con altos estándares éticos y valoran, aunque en menor medida, su capacidad de obtener rendimientos, según indica el nuevo estudio “From Trust to Loyalty: A Global survey of What Investors Want”, que presenta CFA Institute.
También los inversores muestran una creciente preocupación sobre el estado de las finanzas globales. Casi un tercio cree que otra crisis financiera es probable en tres años, con un número significativamente mayor en la India y Francia. Sólo la mitad de todos los inversores creen que las firmas de inversión están «muy bien preparadas» o «bien preparadas» para gestionar su cartera en periodo de crisis. «Los resultados muestran una división importante entre las necesidades de los inversores de las economías desarrolladas y las que representan el futuro de la industria financiera global», dice Paul Smith, presidente y CEO de CFA Institute.
El estudio analiza las opiniones de los inversores minoristas e institucionales en todo el mundo. Los resultados revelan que los inversores demandan información regular y transparente sobre honorarios y conflictos de intereses y piden una estructura de honorarios que reflejen adecuadamente el valor que reciben de las firmas de inversión. Según Smith, «nunca antes había sido mayor el reto para los profesionales de la inversión. Tanto los inversores minoristas como institucionales demandan unos sólidos resultados; sin embargo exigen también más y mejor información y asesoramiento de sus gestores».
Desde el último estudio realizado en 2013, los inversores minoristas aumentan su confianza en la industria de servicios financieros -del 50 al 61%-. La mitad de este incremento se produce en EE.UU., Reino Unido y Australia. Además, tanto minoristas como institucionales creen que los profesionales financieros se están quedando retrasados en asuntos clave como la transparencia sobre la estructura de honorarios y los rendimientos.
«A pesar del positivo aumento de la confianza en la industria de servicios financieros, el rendimiento ya no es el único factor decisivo. Los inversores demandan mayor transparencia y servicio de los profesionales financieros y, con la llegada de los robo advisors, ahora tienen más alternativas que nunca donde elegir. Si los profesionales de la inversión no proporcionan la transparencia requerida, entonces los reguladores podrían obligarlos a hacerlo, para mejor o peor», añadió el presidente de CFA Institute, Paul Smith.