inbestMe ha lanzado al mercado la primera cartera automatizada de inversión en valor, o value investing: inbestMe Advanced Value. Siguiendo la senda de la escuela española de value investing, inbestMe se suma a una tendencia en auge y se convierte en el primer gestor automatizado internacional que comercializa carteras de inversión con alta exposición a valor.
De esta forma, la compañía da un paso más en la máxima personalización que ofrece a través de su servicio inbestMe Advanced, único de sus características en el mercado de los roboadvisors. Una muestra del interés que despierta esta modalidad es el hecho que el 80% del volumen gestionado de sus clientes se destina a las carteras que permiten acceder a servicios de alto valor añadido, más allá de la gestión pasiva básica (totalmente indexada). Asimismo, con el lanzamiento de sus carteras inbestMe Advanced Value, convierte en accesible para todo tipo de inversores modelos de inversión como el value investing, manteniendo las ventajas que caracterizan todas sus carteras: eficiencia, bajos costes, alta diversificación, gestión del riesgo, optimización fiscal y máxima transparencia en la operativa. La fintech, que opera en el sector wealthtech (tenología+gestió patrimonial), prevé cerrar el año triplicando su cartera de clientes y consolida con este lanzamiento su estrategia de carteras temáticas.
La inversión en valor tiene numerosos defensores como el gran gurú de las finanzas, Warren Buffett y, en esencia, se basa en comprar acciones de buenas compañías infravaloradas, es decir, que cotizan por un valor inferior a su valor intrínseco. Los defensores de la inversión en valor defienden que ésta supera claramente cualquier otro factor de inversión en el largo plazo.
La ventaja de invertir en las carteras diversificadas value que propone inbestMe respecto a un fondo de inversión value es que permite adaptar este estilo a las necesidades y al perfil financiero de cada inversor. Es decir, si se invierte en un único fondo se estará exponiendo todo el capital a ese fondo, probablemente con un peso exagerado en renta variable; en cambio, a través de una cartera diversificada value se consigue una distribución de activos adaptada y optimizada para el binomio rentabilidad/riesgo en función de cada perfil de inversor. Y, además, de una forma totalmente gestionada, incluyendo los rebalanceos y reinversiones por parte del Comité de Inversión de inbestMe para que esté totalmente alineada con el perfil seleccionado y las variaciones del mercado.
Los inversores se sienten atraídos por esta modalidad de inversión porque es fácil de entender, ya que se trata de encontrar oportunidades en compañías sólidas al mejor precio, a la vez que se adapta a la psicología inversora, ya que responde mejor a perfiles más conservadores o con especial aversión al riesgo.
“Es innegable que el value investing es una escuela de inversión muy consolidada: Buffett ha demostrado durante muchas décadas que es una manera inteligente de invertir y las previsiones apuntan a que la próxima década puede recuperar el liderazgo perdido en los últimos diez años. Además, actualmente existen fondos indexados o ETFs que buscan el valor automáticamente por nosotros, permitiendo construir carteras con esta temática combinando la indexación (o gestión pasiva) y la inversión en valor”, afirma el CEO de la compañía, Jordi Mercader.
Un alto grado de personalización
La alta personalización de las recomendaciones de inbestMe posibilita que cada cliente obtenga el mejor plan ajustado a su estilo inversor y objetivo vital, ya sea disponer de una cuenta de seguridad en caso de imprevistos que puedan afectar a su economía, planificar una compra importante, empezar cuanto antes a constituir el ahorro para la jubilación o, simplemente, acumular patrimonio al ritmo deseado.
Para ello, ha creado una variada gama de servicios que permite abrir cuentas individuales, conjuntas y de empresa, tanto en euros como dólares, asociadas a tres servicios básicos: inbestMe Basic, inbestMe Dynamic y inbestMe Advanced, a partir de una aportación mínima de 3.000 euros. La diferencia entre estos tres planes radica en su grado de personalización y de distribución de activos de forma estratégica o dinámica, a medida de cada inversor. Este año, la fintech ha implementado sus servicios con el lanzamiento de carteras temáticas para los planes Advanced, como ISR o Value.
inbestMe Basic se articula en base a una gestión principalmente indexada en la que el comité inversor de inbestMe optimiza la cartera a partir de la elección estratégica de activos, a 12-18 meses. A partir de 5.000 euros. Además, inbestMe GO, cuenta Basic dirigida a jóvenes de entre 18 y 25 años, a partir de 3.000 euros y sin comisiones de gestión hasta 5.000 euros y hasta cumplir 26 años.
Por otro lado, inbestMe Dynamic combina un 50% de gestión indexada estratégica y un 50% dinámica gestionada por el comité de inversiones, que periódicamente decide la distribución complementaria táctica, sea para aumentar la rentabilidad de la cartera a largo plazo o reducir el riesgo en determinadas situaciones de mercado. A partir de 10.000 euros.
inbestMe Advanced, pensado para inversores con experiencia y elevada cultura financiera, permite al cliente personalizar totalmente los activos de su cartera, con la opción de cambiar pesos regionales, estilo de inversión y optar, incluso, por inversiones alternativas, a partir de 15.000 euros. Por un lado, inbestME Advanced ISR: aunque el inversor que se decide por la ISR antepone sus valores éticos y sociales a la rentabilidad, este modelo no está reñido con ella. De hecho, las carteras inbestMe vinculadas a ISR pueden llegar a superar la rentabilidad de otros planes hasta un 2% con menor volatilidad, según el backtest realizado desde julio de 2016. Por otra parte, inbestMe Advanced Value: la ventaja que aporta invertir en una cartera value que propone inbestMe, respecto a un fondo de inversión value es que se puede adaptar este estilo a las necesidades y perfil financiero del inversor.
Finalmente, InbestMe Plus: aplicable para cualquier modalidad de cartera (Basic, Dynamic y Advanced), combina las ventajas de la gestión automatizada, como su agilidad, alta rentabilidad y bajos costes, con la asistencia adicional de un gestor financiero personal certificado EFP (European Financial Planner) exclusivo para clientes con patrimonios delegados superiores a 100.000 euros.