Durante el primer trimestre de 2022 se empezó a consolidar el escenario tan complejo en el que estamos inmersos. La inflación empezaba a abandonar ese apellido de «pasajera», al tiempo que estallaba una guerra en Europa. El ahorro financiero de los hogares españoles no ha escapado de su efecto y estas tensiones inflacionistas y el conflicto bélico han provocado un descenso en su volumen, según explican desde Inverco tras analizar los datos del primer trimestre del año.
En este periodo, los hogares españoles redujeron en un 1,1% su saldo en activos financieros respecto a finales de 2021. Como consecuencia, el ahorro financiero, es decir el ahorro en activos financieros, de las familias españolas se situó en 2,65 billones de euros a finales de marzo de 2022, según datos de las cuentas financieras de la economía española difundidos por el Banco de España.
Fondos y depósitos: los únicos instrumentos con flujos positivos
Los fondos de inversión centraron de nuevo el apetito inversor de los hogares en el primer trimestre de 2022: casi 1.100 millones de euros de un total de 2.970 millones de nuevos flujos correspondieron a suscripciones netas en fondos, siendo el único instrumento financiero que registró operaciones netas positivas, con excepción de las cuentas bancarias.
De esta forma, las instituciones de inversión colectiva (fondos y sociedades de inversión) continúan representando más del 15% del ahorro total de las familias españolas. Sin embargo, los depósitos y el efectivo siguen recogiendo la mayor parte del ahorro financiero, constituyen un 39,5% del total. Le sigue la inversión directa con un 28,7%.
Por otro lado, el incremento experimentado por el PIB doméstico hasta marzo provocó que la ratio activos/PIB disminuyera ligeramente respecto al año 2021. No obstante se mantuvo en torno al 215% del PIB.
El total de pasivos financieros de las familias repuntaron ligeramente hasta el 1,6% en términos interanuales, manteniéndose en torno a los 0,8 billones de euros. La riqueza financiera neta (activos menos pasivos) de los hogares experimentó en marzo un descenso del 1,3%, situándose en 1,89 billones de euros, manteniéndose cerca de sus máximos históricos