El “grey power” o poder gris consiste en el porcentaje cada vez mayor sobre el total de los ingresos de la población mundial que corresponderá a los mayores de 60 años. En 2020 se estima que este grupo de población dispondrá de cerca del 25% de los ingresos en el caso de España, EE.UU. o Italia. En otros países como Suecia, Finlandia el porcentaje podría rozar el 35% mientras que en Bélgica, Francia y Japón se situará holgadamente por encima del 30%.
Esta tendencia sumada a las cifras que apuntan a que la población de más de 60 años duplicará a la actual en el año 2045, lleva a muchos gestores a plantear estrategias de inversión en compañías de productos y servicios óptimos para los seniors. “En Japón la venta de pañales para la tercera edad supera la de pañales para bebés”, afirma Olivier Cassé, gestor del Generali Investments SICAV SRI Ageing Population, durante el Foro de Inversión Sostenible organizado por Spainsif y Generali Investment.
El reto es, además, que este tipo de inversión sea también sostenible desde un punto de vista social y medioambiental lo que es lo mismo que cumpla con criterios de ISR (Inversión Socialmente Responsable). Como explicó Bruno Patain, responsable de clientes internacionales de Generali Investments, el filtro ético a las compañías en las que invierten se fundamenta en que “la sostenibilidad genera valor y reduce riesgos a largo plazo”.
Desde esta óptica, Allan Hallez, analista senior de SRI de Generali Investments, describe un proceso de filtrado basado en la estrategia de exclusión que aplican a activos bajo gestión de más de 380.000 millones de euros. “Quedan excluídas las empresas que violan los derechos humanos, que provocan daños medioambientales o están implicadas en casos de corrupción como, por ejemplo, Petrobras”, explica.
Posteriormente, el análisis identifica el cumplimiento de hasta 34 criterios sociales y medioambientales entre los que se incluyen la emisiones de gases, las condiciones laborales, el diálogo social o la conservación de la biodiversidad. Solo las compañías con una puntuación general superior al 50% pasan el filtro y son, alrederor, del 50% de las que companían el universo de inversión inicial.
España y el envejecimiento de la generación del “baby boom”
Con una rentabilidad en el último año del 18,7%, el Generali Investments SICAV SRI Ageing Population pone el foco, tras el filtro SRI, en las empresas que crecerán más que el PIB por razones demográficas y que giran entorno a tres grandes pilares temáticos: salud, pensiones y ahorro y consumo. Dentro de ellos, aparecen productos y servicios específicos como los seguros de vida, los audífonos o los suplementos dietéticos.
De hecho, España tiene mucho protagonismo en esta megatendencia de inversión ya que el segundo país más longevo de la OCDE y la UE. Con una tasa de natalidad del 1,33 hijos por mujeres, la llegada de la generación del baby boom (nacidos en los años 60) a la edad de jubilación supone un reto en muchos aspectos y una oportunidad “si invertimos en compañías que fabrican productos u ofrecen servicios a este grupo de población”, concluye Cassé.