Goparity, plataforma de finanzas sostenibles, traspasa la frontera tras obtener la licencia de la Comisión del Mercado de Valores Mobiliarios portuguesa para operar a nivel europeo y llega a España para impulsar la democratización de la inversión sostenible. Es una de las tres plataformas de crowdfunding de mayor crecimiento en Europa que ha financiado más de 341 proyectos, 12 de ellos en España, con un impacto positivo en 89.0000 personas.
Enmarcada en las finanzas verdes, la fintech lusa Goparity conecta empresas con inversores (particulares o institucionales) que quieran invertir de forma ética, en proyectos sostenibles alineados con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas. Un nuevo tipo de inversión en el que se puede participar con una aportación mínima de 5 euros y que ofrece rentabilidades que suelen oscilar entre el 4% y el 9% de interés anual, en dependencia del proyecto en el que decidan invertir.
Por otro lado, organizaciones y empresas que necesitan financiación para sus proyectos de impacto positivo pueden captar dinero de una forma más fácil, rápida y flexible que mediante la banca tradicional. Goparity se presenta como una alternativa transparente -sin comisiones ocultas o por apertura- con agilidad burocrática, así como acceso a una creciente comunidad de inversores.
A pesar de llegar ahora con el respaldo del Reglamento Europeo del Crowdfunding, para operar en toda Europa, Goparity ya ha financiado 6 proyectos en distintas localidades españolas, para los que logró recaudar 828.300 euros. Una cifra, que, tras la formalización jurídica, esperan disparar a los 1,5 millones de euros en el primer trimestre de actuación en España, apuntando a llegar en torno a los 7 millones de euros a finales de año, fecha para la que esperan tener más de 80.000 usuarios.
Además, en su apuesta por España, Goparity forma ya parte de un consorcio recién homologado por el Ayuntamiento de Barcelona que, en conjunto con Eco2Next (empresa de servicios energéticos) y Lean Ventures (fondo de inversión portugués) pretenden invertir alrededor de 5 millones de euros en comunidades energéticas de vecinos de Barcelona en los próximos cinco años.
“Hace mucho que vemos a España como un país prioritario para nosotros. El impresionante ecosistema de startups y emprendedores ha registrado un gran crecimiento en lo que a impacto social y ambiental se refiere. Además, es un país riquísimo en recursos naturales que aún tiene muchos desafíos que enfrentar en los que podemos ser un catalizador al prestar acceso a opciones alternativas de financiación para el potente sector empresarial español”, expone Nuno Brito Jorge, CEO y fundador de Goparity. “Hace más de tres años que vivo en España y veo una implicación muy elevada de los españoles tanto en los temas sociales y de sostenibilidad, como en lo que respecta al empoderamiento financiero. Creemos que un producto que une todo esto -el derecho a escoger dónde inviertes tu dinero y saber el impacto que tiene- encajará muy bien», concluye Brito.
Impacto internacional
Bajo el paraguas de las finanzas verdes, la fintech lusa ha conseguido situarse entre las tres plataformas de crowdlending de mayor crecimiento en Europa y líder en crowdfunding sostenible, según Todo Crowlending, tal y como demuestra su trayectoria con proyectos financiados en 18 países con inversores de 73 nacionalidades diferentes, además de una filial en Canadá (autorizada bajo el regulador del estado de Ontario).
Desde su creación en 2017, Goparity ha recaudado más de 33 millones de euros (20 millones de los cuales entre 2022 y 2023) con los que ha financiado más de 360 proyectos, que han tenido un impacto positivo en 89.000 personas, creado 5.000 puestos de trabajo y evitan anualmente la emisión de más de 25 toneladas de CO2 a la atmósfera. Además, desde la última ronda de inversión por valor de 2 millones de euros, la empresa cuenta con inversores como la multinacional francesa Schneider Electric, Mustard Seed Maze y casi 1.000 de sus propios usuarios que se juntaron como pequeños accionistas.
De cara a este 2024, la fintech lusa espera alcanzar un volumen de inversión alrededor de los 20 millones de euros. Una meta ambiciosa, que pasa por la implicación ciudadana para avanzar hacia un futuro más sostenible.