Los errores en la toma de decisiones que pueden ocurrir en el proceso de inversión a menudo son demasiado humanos. El inversor necesita una buena dosis de autodisciplina para evitar fallos habituales, como la inercia, el efecto manada, el exceso de confianza o la aversión a las pérdidas. Un nuevo estudio de Allianz Global Investors muestra que los fondos multiactivo pueden ayudar a los inversores a superar esas dificultades. «Nuestra investigación muestra que las entradas netas en fondos multiactivo se han mantenido estables durante las fases de mercado alcistas y bajistas, proporcionando a los inversores una forma efectiva de adquirir autodisciplina, ya que se comprometen a vincularse a una estrategia estable», explica Hans-Jörg Naumer, director de Global Capital Market Analysis y Thematic Research.
Tendencia hacia el multiactivo, EE.UU. rezagado
Entre 2002 y 2017 se destinaron flujos netos de efectivo de 870.000 millones de euros a fondos multiactivo, según datos de Lipper. Les siguieron en el ranking los fondos de bonos (504.000 millones de euros), fondos de renta variable (44.000 millones de euros) y otros fondos (220 mil millones de euros). Eso significa que en Europa, más de uno de cada dos euros se invirtió en fondos mixtos en los últimos 15 años. En el caso de España, los fondos multiactivo coparon un 37% de los activos totales en las carteras en 2017, una cifra aún más alta que la media europea.
En EE. UU., los flujos en multiactivo suman 1.139 mil millones de dólares, ya que los inversores minoristas de EE.UU. destinan significativamente más dinero a acciones (2.107 mil millones de dólares) y bonos (2.065 mil millones de dólares).
Naumer añade que, «en Europa, los fondos multiactivo no son un sustituto de otros tipos de fondos, sino más bien una clase de activos en sí: los flujos de entrada en estos fondos apenas se correlacionan con los fondos de bonos o renta variable, por ejemplo. Además, los inversores parecen utilizar fondos multiactivo de forma muy selectiva para administrar su asignación de activos, como se puede ver en las sobreponderaciones y subponderaciones relativas basadas en flujos de fondos. En EE. UU., esto parece menos evidente».
Fondos multiactivo como un medio de asignación de activos
La mayor demanda de fondos mixtos se refleja no solo en el tamaño de los flujos sino también en las posiciones, es decir, las asignaciones generales de los inversores, como lo indica la distribución de los activos en acciones, bonos, instrumentos del mercado monetario, alternativos y, por supuesto, fondos de multiactivos. Esto es particularmente evidente en Alemania, donde la presencia de los fondos multiactivo en las carteras creció en ese período del 12% al 32%, mientras que en Europa creció del 21% al 26%.
En EE.UU., la parte correspondiente a los fondos multiactivo con respecto a los activos totales, comenzando desde un nivel bajo, ha avanzado muy lentamente del 6% al 13%. En el caso de España, las cifras son particularmente altas con respecto a la media europea: un 37% en 2017. Si consideramos
el desarrollo del mercado en combinación con el comportamiento del inversor y examinamos la decisión de asignación activa, es decir, la sobreponderación e infraponderación en relación con la tendencia general del mercado, el proceso de decisión de inversión se vuelve aún más claro.
El futuro de los multiactivo
La diversificación es un elemento clave para la gestión de la cartera. Desafortunadamente, la diversificación de la cartera tradicional tiene una deficiencia principal: parece fallar cuando más se necesita, es decir, en las turbulencias del mercado severas. La búsqueda de nuevas soluciones adquiere aún más urgencia hoy en medio de preocupaciones sobre las perspectivas de una mayor volatilidad del mercado en un momento de incertidumbre política y macroeconómica, y el desafío constante de generar rendimiento en un entorno de tipos de interés bajos e incluso negativos .
Thomas Zimmerer, director global de especialistas en productos multiactivos, cree que «la introducción de estrategias dinámicas de asignación de activos en una cartera puede ayudar a los inversores a gestionar estos riesgos a la vez que proporciona una nueva fuente de rentabilidad más allá de la selección y la asignación tradicional. Al emplear un proceso de inversión sofisticado que identifica y responde a las tendencias dentro y a través de las clases de activos, una gama de enfoques dinámicos de asignación de activos puede utilizarse como elemento fundamental para mejorar la diversificación de las carteras y mejorar la mitigación de riesgos y los rendimientos potenciales».