Flossbach von Storch refuerza su apuesta integral por la sostenibilidad y amplía su proceso de inversión para incluir criterios de sostenibilidad importantes, además de excluir determinados modelos de negocio de todo el grupo. Según explica la firma, este paso reforzará su estrategia ESG actual y se implementará en lo sucesivo en el proceso de análisis.
En este sentido, Flossbach von Storch matiza que uno de los factores a los que se prestará especial atención son las emisiones de gases de efecto invernadero, así como el cumplimiento de los principios del Pacto Mundial de las Naciones Unidas (United Nations Global Compact), que incluyen los derechos humanos, la regulación laboral, la protección del medioambiente y la lucha contra la corrupción.
“El tema de la sostenibilidad siempre ha formado parte de nuestra filosofía de inversión. Preservar el valor de los activos que nos confían nuestros clientes o generar rendimientos adecuados solo es posible a largo plazo, si durante el proceso de inversión estudiamos detenidamente en qué medida las empresas en las que invertimos actúan de forma responsable. Estamos convencidos de que, a la larga, las empresas solo pueden tener éxito si se esfuerzan por conciliar los aspectos económicos, ecológicos y sociales”, afirma Bert Flossbach, cofundador y consejero de Flossbach von Storch AG, sociedad matriz de Flossbach von Storch Invest S.A.
Este cambio va acompañado de la incorporación de especialistas en ESG al equipo de analistas. “Nuestro proceso de inversión se caracteriza por un análisis fundamental interno. Nos mantenemos fieles a nuestra filosofía: no externalizamos el tratamiento responsable de los factores de sostenibilidad, sino que los abordamos de forma crítica e integramos esa información como un componente importante en nuestro proceso de análisis integral de empresas”, explica Andreas Eickhoff, socio y Head of Equity Research de la firma.
Según señalan, su objetivo es excluir de todo el grupo las inversiones en empresas relacionadas con la fabricación y la distribución de armas ilegales, armamento y carbón, así como la producción de tabaco. También, quedarán excluidas las empresas que infringen gravemente los principios del Pacto Mundial de las Naciones Unides y los emisores públicos con una puntuación insuficiente en el índice de Freedom House.
Con la ampliación de la política de inversión, la firma realizará también ajustes normativos en consonancia con las obligaciones de divulgación establecidas por el reglamento (UE) 2019/2088 (SFDR). Así, a partir del 19 de abril de 2022, los fondos de inversión abiertos de Flossbach von Storch tendrán la consideración de productos conforme al artículo 8. Además, a partir del 2 de agosto de 2022, se tendrán en cuenta en el proceso de inversión las repercusiones negativas más importantes sobre los factores de sostenibilidad (conocidas de forma abreviada como PAI, principal adverse impacts). “De esta manera, todos los fondos de inversión abiertos del grupo Flossbach von Storch cumplirán los requisitos de la directiva MiFID II para el asesoramiento de inversión a inversores orientados a la sostenibilidad”, afirman.