En el marco de su compromiso constante con la inversión sostenible, Fidelity International (Fidelity) ha anunciado la ampliación de su oferta en renta fija sostenible con el lanzamiento dos nuevos fondos: el Fidelity Funds 2 – Sustainable Social Bond Fund y el Fidelity Funds 2 – Sustainable Global Corporate Bond Fund.
La gestora considera que son muchos los retos que se plantean para hacer avanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU (ODS), pero no actuar tendrá consecuencias irreversibles. Se calcula que existe una brecha de financiación anual de 4 billones de dólares entre lo que se necesita y lo que se ha aportado para alcanzar los ODS, siendo el grueso de estas metas de índole social. Este hecho ofrece una oportunidad a los inversores.
En este contexto, la firma señala que el fondo Fidelity Funds 2 – Sustainable Social Bond tiene como objetivo revalorizar el capital y generar rentas realizando inversiones sostenibles. Invierte al menos el 70% de sus activos en títulos de deuda emitidos por empresas de alta calidad crediticia (investment grade) de cualquier parte del mundo y al menos el 80% de la cartera se invierte en bonos que tienen una orientación social. El fondo invierte en emisores que suministran un producto o servicio que contribuye a los ODS de la ONU de carácter social y en bonos que contribuyen directamente a temáticas sociales mediante el uso del capital recaudado.
Según matizan, este nuevo fondo forma parte de un compromiso más amplio de Fidelity con el desarrollo de soluciones de inversión en renta fija temáticas que aborden el cambio climático, la biodiversidad, el agua y los problemas sociales.
El énfasis en estas temáticas obedece a una firme convicción: los bonistas tienen un papel importante que desempeñar para afrontar estos problemas y ayudar a reducir la brecha que existe en la financiación que se requiere para abordar estas cuestiones. Además, complementa la estrategia actual de bonos climáticos de la compañía por medio del Sustainable Social Bond Fund, que incluye la resiliencia y adaptación frente al cambio climático como una de sus subtemáticas y hace hincapié en la importancia de mejorar la capacidad de adaptación a los efectos del cambio climático.
Para una mayor diversificación, el Fidelity Funds 2 – Sustainable Global Corporate Bond Fund trata de conseguir la revalorización del capital y generar rentas mediante inversiones sostenibles. Al menos el 70% de sus activos se invertirá en títulos de deuda emitidos por empresas de alta calidad crediticia (investment grade) de cualquier parte del mundo. «Estos títulos contribuirán a objetivos medioambientales o sociales que estén en consonancia con uno o más ODS de la ONU, lo que ofrece un enfoque más diversificado comparado con los fondos temáticos puros», sostiene la gestora.
Ambos fondos están acogidos al artículo 9 del Reglamento de divulgación de información financiera sobre sostenibilidad (SFDR), lo que significa que el 100% del patrimonio, descontando la liquidez y los instrumentos de cobertura, se destinará a “inversiones sostenibles”. Los fondos estarán gestionados tanto por Kristian Atkinson (gestor principal del Sustainable Global Corporate Bond Fund) como por Shamil Gohil (gestor principal del Sustainable Social Bond Fund). Juntos, suman más de 42 años de experiencia y están respaldados por los amplios recursos de inversión e inversión sostenible de Fidelity en todo el mundo.
Con motivo del lanzamiento, Christophe Gloser, responsable de distribución para Europa de Fidelity International, señaló: “Estamos encantados de ampliar nuestra gama de fondos sostenibles con estos últimos lanzamientos, que se inscriben en nuestra determinación de ofrecer a los clientes la capacidad de invertir en estrategias acordes con los ODS y el artículo 9 del SFDR. Estos fondos constituyen una solución que complementa nuestras estrategias de renta variable mundial sostenible y brinda a los clientes un conjunto de componentes sostenibles para sus carteras. Además, se suman a los logros que estamos obteniendo en el desarrollo de la estrategia de bonos climáticos, que recientemente superó la barrera de los 320 millones de dólares de patrimonio gestionado”.