Finnovating, la consultora Internacional de innovación abierta, ha publicado el primer informe que recoge las inversiones del sector fintech a nivel europeo durante el primer trimestre de 2019. España se sitúa en quinta posición, con una inversión registrada de 108 millones de euros, por delante de países como Holanda y Suecia, con gran tradición financiera.
Según el informe, España estaría por detrás de Reino Unido, con 853 millones de euros (38,9% del total), Alemania con 637 millones de euros (29,05%), Francia, 168 millones de euros (7,66%) y Suiza con 143 millones (7%). De las 124 rondas de inversión en compañías fintech en Europa en el primer trimestre del año, casi el 90% se han producido en cinco países, y las 10 principales representan cerca del 59% de la inversión. Además, las áreas que atraen más inversión son préstamos, pagos, soluciones tributarias e inversión en cripto monedas, que concentran el 49% de la inversión.
Santiago Molina, consultor fintech y wealthtech de Finnovating, asegura que “la previsión es que siga creciendo este tipo de inversión porque España resulta muy atractiva para fondos y bancos extranjeros por la madurez de su ecosistema. Además, la llegada del Sandbox dará un marco legal que las favorecerá aún más”.
En cuanto a la inversión en España, aunque este trimestre se ha concentrado en compañías con sede en Barcelona, todas poseen usuarios distribuidos por todo el país, y se considera algo puntual, ya que el 55% de las startups del sector se encuentran en Madrid frente al 12% en la ciudad condal y al 21% de Valencia. Además, es importante añadir que en España también se han producido tres inversiones en compañías proptech y una en legaltech.
Desde la firma explican que, para seguir trabajando por la cohesión y desarrollo del ecosistema fintech en nuestro país, Finnovating celebra la IV edición de la FinTech Unconference, el encuentro privado donde reúne a los 100 CEOs de las startups y scaleups más innovadoras que operan en España. Durante esta jornada, celebrada en FinTech Plaza, se comparten las preocupaciones, retos y oportunidades con el objetivo de encontrar oportunidades de colaboración también con las empresas tradicionales que apoyan la Unconference en su apuesta por la innovación abierta.