El ministro de Hacienda brasileño, Guido Mantega, reconoció este lunes que su país atraviesa una “mini crisis”, debido a la turbulencia en los mercados que además se ha visto agravada por los confusos mensajes lanzados por la Reserva Federal estadounidense sobre sus planes para reducir el estímulo monetario.
Guido, que hizo estas declaraciones en el marco de una reunión con empresarios en Sao Paulo, subrayó que “es una mini crisis la que estamos atravesando, pero tendrá un impacto mucho menor a lo que pasó digamos, en la crisis europea del 2011 y 2012”.
En este sentido, el ministro quiso lanzar un mensaje de tranquilidad al apuntar que las reservas extranjeras, históricamente altas, y los bajos niveles de deuda pública ayudarán a Brasil a protegerse de una fuerte caída de la moneda local y un crecimiento económico más débil dentro y fuera del país, informa Reuters.
Asimismo, el titular de Hacienda considera que la Fed ha proporcionado una pobre explicación sobre sus planes para reducir el estímulo monetario, lo que ha contribuido a las fuertes oscilaciones en el valor de las monedas y acciones de las economías emergentes.
Sin embargo, Mantega dijo que la economía local se mantendrá robusta, impulsada por un aumento en la inversión y el impacto de concesiones de infraestructura