En los últimos años, los fondos de fondos de entidades externas han crecido más rápido que los fondos de fondos creados por las propias gestoras de forma interna, pero eso está cambiando: según un informe reciente de la consultora Cerulli, una nueva “raza” de fondos de ETFs o fondos pasivos y de bajo coste, fabricados de forma interna, está prosperando.
Los fondos de fondos externos verán mayores flujos de aquellas gestoras que puedan convencer a los inversores de que los mayores costes que conllevan están justificados por los resultados, dice Cerulli Associates. El estudio añade, sin embargo, que los costes empiezan a ser una preocupación clave para los inversores.
“Los inversores normalmente tienen que pagar dos capas de comisiones. Una es a la gestora que elige los fondos. La gestora ha de pagar a su vez para comprar los fondos subyacentes, incluso en el caso de fondos de la misma gestora, donde la transferencia de dinero sería interna”, explica Angelos Gousios, director de análisis retail en Europa de la consultora.
Cerulli explica que para la mayoría de fondos de fondos, el efecto de esa capa extra de comisiones es “demasiado obvio”. Así, un fondo de fondos de renta variable puede ponerse en 230 puntos básicos de comisión, frente a un cargo anual de gestión de unos 137 puntos básicos. En otras palabras: los costes más allá del coste de gestión anual empujan el total de gastos en un 68%.
En un fondo de bolsa estándar, que tendría un cargo de gestión de unos 129 puntos básicos, y unos cargos totales de 167 puntos básicos, la diferencia sería del 29%. La diferencia entre el coste de gestión anual y la cifra de costes totales, dice Cerulli, es mayor en los fondos de fondos, por la simple razón de que invertir en otros fondos tiende a empujar al alza los costes totales más que los costes de trading derivados de comprar acciones.
El experto explica que los proveedores de fondos de fondos se defenderán alegando que, como inversores profesionales, son capaces de comprar las clases de participaciones de más bajo coste. “Sin embargo, todavía hay gastos extra que los inversores quien ver justificados. Si los costes son algo clave, un fondo de fondos pasivos propios es una solución obvia”. En la era de los ETFs, explica el experto, un fondo de ETFs es “simplemente lógico”, dice, citando el tipo de fondos ofrecidos por Deutsche Bank y Vanguard como ejemplos.