Los ejecutivos financieros de las principales compañías estadounidenses son relativamente optimistas sobre el futuro, pero mantienen la cautela ante las incertidumbres económicas del país. Una de sus mayores preocupaciones, según la última edición de la encuesta Grant Thornton entre 900 CFOs y otros altos ejecutivos financieros, es la falta de acción del Congreso de Estados Unidos sobre la reforma fiscal.
Las buenas noticias para los profesionales de las finanzas es que los CFOs están realizando una agresiva labor de búsqueda y contratación de nuevos talentos. La gran mayoría de los directores financieros, hasta el 70%, tiene una necesidad crítica de retener y fichar profesionales que ayuden a respaldar el crecimiento de la compañía.
De hecho, el 40% espera que las nuevas contrataciones en su negocio aumenten en los próximos seis meses, mientras que el 52% espera que el ritmo siga siendo el mismo. La mayoría de los directores financieros (el 67%) planea aumentar los salarios en el próximo año, que han permanecido estables desde 2014.
Qué les quita el sueño
En el lado de las preocupaciones, más de la mitad de los directores financieros (el 55%) contestó en el sondeo que la incertidumbre en la economía estadounidense es una de sus principales preocupaciones, ya que podría afectar al crecimiento del negocio en los próximos 12 meses. Este resultado se da a pesar de que la mayoría de los directores financieros esperan que las condiciones macro en el país en general sigan siendo las mismas (49%) o incluso mejoren (un 43%) durante ese periodo, lo que sugiere que hay otros factores detrás que actúan como una barrera al crecimiento.
«Aunque la economía de Estados Unidos se ha estabilizado, nuestros datos sugieren que la incertidumbre relacionada con otros factores económicos está haciendo que la planificación estratégica sea especialmente difícil para los ejecutivos financieros», explica Randy Robason, socio director de los Servicios de Impuestos de Grant Thornton. «Los directores financieros quieren que Washington, los reguladores o la Reserva Federal ofrezcan algunas respuestas pero no están consiguiendo nada más que indecisión.»
Esta preocupación de los altos ejecutivos parece haber aumentado considerablemente desde principios de este año. En mayo de 2015, sólo el 22% veía las incertidumbres económicas como un límite importante a la capacidad de crecimiento de su empresa de cara al próximo año.