En la presentación de su nueva estrategia la gestora independiente Inverseguros- Dunas Capital se muestra dispuesta a ir a por todas y multiplicar por cinco su patrimonio en los próximos cinco años. El objetivo a 2022 es situarse en los 5.000 millones de euros en activos bajo gestión donde la mayor parte corresponderá a fondos de inversión y fondos de pensiones (2.500 millones). Las otras patas sobre las que pretende apoyar su crecimiento futuro son el sector inmobiliario (1.000 millones) así como activos alternativos en los sectores de telecomunicaciones y transporte (1.500 millones).
Un proyecto de futuro que toma forma tras el fichaje de los pesos pesados de Aviva Gestión Alfonso Benito, José María Lecube y Carlos Gutierrez, quienes ahora son director de Inversiones, responsable de renta fija y renta variable de la firma. “Ya tenemos el talento en la gestión” afirma David Angulo, presidente de la compañía durante un encuentro informativo en Madrid.
Un talento al que reconoce haber gestionado “el mejor fondo de inversión value que ha habido en España, Aviva Espabolsa”, y que no circunscribe a un gestor estrella sino a todo un equipo de gestión. “Es bueno que haya gestores value, pero es mucho mejor que existan equipos value”, afirma.
La gama de fondos de Inverseguros-Dunas Capital se concreta, por lo tanto, en un fondo de renta variable española que seguirá la estela de Aviva Espabolsa, otro fondo índice del S&P 100 y dos nuevos fondos, entre los que se encuentra uno de retorno absoluto de renta fija. “Existe un hueco que no se está explotando bien en value y es la renta fija. Si consigues analizar las inversiones que tienen valor para el cliente, lo que funciona de verdad es el bueno, bonito y barato”, explica
Inversiones alternativas con baja volatilidad
Inverseguros-Dunas Capital lanzará, además, la plataforma de inversión inmobiliaria Dunas Real Estate centrada en el mercado vacacional español donde “todavía hay recorrido”, señala Angulo. En este contexto, se enmarca su reciente acuerdo con KKR para la compra del grupo mallorquín Intertur Hotels.
Otros activos donde ven oportunidad para sus clientes institucionales es en los activos alternativos en el sector del transporte con la compra de aviones, buques o equipos de eficiencia energética. En este sentido, planean el lanzamiento de un fondo Dunas Real Assets especializado en el alquiler de aviones que ofrezca una rentabilidad de entre el 7% y el 8%.
Se trata, explica Angulo, de productos que surgen como resultado de “mucho tiempo hablando con aseguradoras y escuchando sus necesidades”. “Hace años las aseguradoras se hincharon a comprar deuda española al 5% y esa deuda está venciendo. Ahora necesitan otras inversiones a largo plazo”, añade.
Angulo rechaza, no obstante, que se trate de productos con demasiado riesgo y, señala, por ejemplo, que la volatilidad del fondo de telecomunicaciones Dunas Birdie Capital, se ha situado por debajo del 2% “Es un fondo long/short con el 100% de las posiciones cubiertas súper conservador”, explica.
“¿Comprar nuevas gestoras?, ¿Por qué no?”
Ese crecimiento orgánico previsto no es óbice para que puedan seguir analizando otras gestoras que tengan capacidad de distribución sin descartar ni siquiera las pertenecientes a una entidad financiera. “¿Por qué no?” se ha preguntado Angulo que, eso sí, reconoce que en este asunto miran más hacia Portugal que hacia España. “Queda muy poco hueco, pero algo queda”, afirma.
Lo que sí descartan es abrirse al cliente minorista porque, “el riesgo de miss-selling (ventas abusivas) me da mucho miedo” en referencia a la entrada en vigor de MiFID II. “Nosotros nos centramos en la gestión y no en el asesoramiento. Los inversores privados pueden, no obstante, comprar nuestros fondos a través de otras plataformas”, señala Angulo.
Angulo ha declarado además que el contexto actual es «una ventaja» para Dunas Capital, ya que el envejecimiento de la población significará «un aumento en los ahorros»; la «presión regulatoria» les beneficia al ser independientes; y espera que los tipos de interés se mantengan por debajo del 1,5 % o el 2 % durante los próximos 20 años.