El 57,2% del patrimonio invertido en fondos de inversión en 2017 se concentró en vehículos de renta variable, mixtos, globales y de retorno absoluto, nueve puntos por encima del registrado el año anterior. El 27% se invirtió en vehículos monetarios y de renta fija, mientras que el porcentaje en productos garantizados/rentabilidad objetivo se situó en el 15,7%, frente al 22% del año anterior, lo que supone un cambio de tendencia con respecto a lo ocurrido en años anteriores, según un informe elaborado por el Observatorio Inverco, a partir de la información que han proporcionado las sociedades gestoras
de fondos de inversión nacionales.
El buen comportamiento de los mercados financieros durante 2017 ha llevado a los partícipes a incrementar sus inversiones en fondos con mayor exposición a renta variable, revirtiendo así el comportamiento de 2016, cuando la eleva volatilidad presente en los mercados hizo que los españoles incrementaran sus posiciones en fondos de perfil conservador.
Los fondos mixtos/globales/retorno absoluto han aumentado hasta el 44,1% del total desde el 37,5% de 2016, lo que supone más del triple del porcentaje que representaban en diciembre de 2012 (14,5%). Los fondos de renta variable alcanzan el 13,1% del total desde el 10,7% del año pasado.
Por su parte, los fondos garantizados/rentabilidad objetivo han perdido representatividad de manera significativa, cayendo hasta el 15,7% desde el 22% de 2016 mientras que los fondos monetarios/renta fija también han visto reducido su peso en el total del patrimonio. En 2017 se sitúan en el 27% del total frente al 29,8% de 2016.
Por comunidades autónomas, Navarra, La Rioja, Cataluña y Cantabria concentran el mayor porcentaje de patrimonio en fondos de renta variable y mixtos (por encima del 60%) y el resto de regiones también supera, al menos, el 50%, salvo Galicia, donde el porcentaje de inversión en estas categorías se situó en el 48,2%. Madrid, Cataluña y País Vasco acumulan el 53,2% del ahorro total nacional en fondos de inversión, un porcentaje superior al que representa la población de estas tres comunidades (35%). A lo largo de 2017, la inversión en fondos en España aumentó en más de 27.000 millones de euros (11,7%), hasta situarse en 262.834 millones de euros, su nivel más alto de la serie histórica, y el número de cuentas de partícipes se incrementó un 24,8%. Murcia, Galicia y Aragón lideraron el crecimiento de la inversión en fondos, con incrementos superiores al 16%.
En este escenario, los fondos de inversión se consolidan como activo de referencia para las familias españolas y el ratio frente a los depósitos alcanza ya el 23,7%, por encima del 21,4% del año anterior, y más del doble de lo que representaba en 2012 (11,4%). Además, a lo largo de 2017, continuó creciendo la inversión en fondos sobre el PIB nacional, hasta alcanzar ya el 22,6%, el doble que hace cinco años (11,6%). En La Rioja, País Vasco, Aragón y Navarra, ese porcentaje se sitúa ya por encima del 35% del PIB regional
José Luis Manrique, director de estudios del Observatorio Inverco, señala que “el elevado desarrollo en los últimos años de los servicios de gestión discrecional de carteras explica el gran incremento en el número de cuentas de partícipes, ya que asigna a cada partícipe varios fondos. No obstante, el significativo crecimiento del número de cuentas y del patrimonio total invertido demuestra el elevado grado de penetración de los fondos como un instrumento adecuado de ahorro e inversión para las familias españolas”.
Riesgo del partícipe
En media, el partícipe nacional sigue manteniendo su patrimonio en fondos con perfil de riesgo medio-bajo, aunque el peso del perfil bajo ha caído significativamente con respecto a 2016 hasta el 42,7% desde el 51,8%. Extremadura y Cantabria son las regiones con mayor patrimonio invertido en fondos con perfil medio, con porcentajes superiores al 50%, si bien la mayoría se encuentran en torno al 50% del total de patrimonio invertido.
En cinco comunidades, la inversión en fondos con perfil más dinámico supera a la media nacional, 13,1% (Madrid, Aragón, País Vasco, La Rioja y Cataluña).