Los inversores y ahorradores españoles siguen caracterizándose por planificar sus inversiones con un sesgo conservador o moderado. Así, lo que más valora el 42,6% de ellos a la hora de invertir en bolsa es “no perder dinero”, mientras que el 30,2% declara que prefiere obtener “menos rentabilidad y disfrutar de cierta seguridad” en la inversión. Tan solo un 27,2% reconoce optar por un enfoque más “agresivo” persiguiendo obtener la “máxima rentabilidad” por su dinero, según se desprende de la encuesta del Índice de Confianza del Inversor que elabora trimestralmente en España la gestora internacional J.P. Morgan Asset Management.
En relación con los fondos de inversión, los inversores consideran que son un buen producto para poder elegir qué grado de riesgo asumen (76,6%), conseguir una buena rentabilidad (75,7%), invertir su dinero de una manera más eficiente que en depósitos y libretas (72,4 %) o ahorrar para cumplir con sus objetivos financieros (71,9%).
Aumenta el interés por los fondos de inversión y la bolsa, pero se estanca la intención de inversión en planes de pensiones
A pesar de los altos niveles de inflación y los bajos tipos de interés, el 37,5% de los inversores declaran tener intención de invertir su dinero en depósitos, libretas y cuentas de ahorro en los próximos seis meses, una tendencia que baja dos puntos con respecto al trimestre anterior.
Destaca el aumento en tres puntos del porcentaje de inversores que considera los fondos como mejor alternativa de inversión (un 23,3%), así como el incremento en dos puntos del número de inversores que optará por la inversión directa en bolsa (un 15,7%).
La intención de inversión en planes de pensiones (18,5%) se mantiene estable con respecto al trimestre anterior, pese a la reducción de incentivos a la tenencia de este tipo de productos financieros. Una vez más, se mantiene el alto porcentaje (41,9%) de ahorradores e inversores que afirma no ahorrar nada para completar su jubilación.
La confianza de los inversores particulares se mantiene en niveles positivos, aunque se modera
La confianza del inversor y ahorrador español en la evolución de los mercados bursátiles sigue manteniéndose en niveles positivos significativamente altos (2,03), aunque se modera con respeto a la euforia registrada en anteriores trimestres cuando tocó por dos veces máximos históricos.
Así lo revela Se trata del análisis más amplio realizado en España de forma periódica desde 2007 sobre el comportamiento y las motivaciones de los inversores y ahorradores españoles, así como su nivel de confianza en los mercados.
De acuerdo con este indicador, la confianza del inversor y ahorrador español se situó durante el último trimestre de 2021 en los 2,03 puntos, volviendo a los niveles de optimismo moderado registrados al principio del año tras el anuncio del descubrimiento de las vacunas contra el COVID-19. Esta cifra del último trimestre del año se aleja de los altos valores del segundo (4,02) y tercero (3,73), donde el avance de la vacunación unido a la bajada de la incidencia del virus y a unos tipos de interés bajos, motivaron una sensación de vuelta a la normalidad y de recuperación económica, lo que propició un gran interés por los mercados, especialmente el de renta variable.
“En el último trimestre del año podemos observar cierta moderación en la confianza de los inversores y ahorradores españoles, posiblemente motivada por factores como el aumento de la inflación y la irrupción de la variante ómicron. Aun así, un índice superior a 2,0 se ha visto pocas veces en la serie histórica de este estudio. Seguimos por lo tanto en un escenario de optimismo y confianza en la evolución de los mercados a medio plazo”, apunta Francisco Márquez de Prado, Sales Executive de J.P. Morgan Asset Management.
Preguntados sobre cómo evolucionará la bolsa en los próximos seis meses, siguen siendo mayoría los inversores y ahorradores con una percepción de estabilización de la pandemia y de mejora de la situación económica. Así, el 35,5% piensa que la bolsa se mantendrá en los niveles actuales y el 40,2% que subirá. Este número de optimistas se mantiene como uno de los porcentajes más altos de toda la serie histórica y, al mismo tiempo, contrasta con un aumento en el número de inversores y ahorradores pesimistas, que crece y alcanza ya al 24,4% de los encuestados frente al 16,9% del trimestre anterior.
Una visión más negativa de la situación económica seguida de la influencia de la crisis del COVID-19 fueron los motivos esgrimidos en mayor medida por los pesimistas para justificar su respuesta. Cabe destacar, además, que, por primera vez en los últimos años, el aumento del precio de la energía y de los bienes y servicios en general irrumpen como la tercera causa más señalada por aquellos ahorradores e inversores que se muestran menos confiados en la futura evolución de los mercados.
Europa se consolida en la mente de los inversores como el mercado con mejores perspectivas
El mercado europeo vuelve a ser, al igual que el trimestre anterior, el que mayores expectativas de rentabilidad despierta a medio plazo en los inversores y ahorradores españoles. La confianza en el desempeño de los mercados estadounidense – que sube ligeramente respecto al trimestre anterior-, asiático y español, se sitúa en niveles muy similares. Por último, los mercados emergentes y el japonés continúan siendo los que menos optimismo despiertan respecto a su comportamiento en los próximos meses, una tendencia que se repite invariablemente a lo largo de toda la serie histórica registrada por la encuesta de J.P. Morgan Asset Management.