Candriam amplía su política de exclusiones para las inversiones. La gestora ha decidido extender el alcance de su exclusión de actividades controvertidas para todos sus fondos al carbón térmico, el tabaco y las armas químicas, biológicas y de fósforo blanco.
Según ha informado la firma, la exclusión será aplicable a todos los activos, estrategias alternativas, indexadas y smart beta y estarán completamente implementadas a 31 de diciembre de 2018. Candriam introducirá umbrales de exclusión homogéneos para la totalidad de su patrimonio gestionado. La exclusión relativa al carbón térmico se basa en un nivel de exposición (directa e indirecta) de un 10% como máximo. Además, Candriam descartará todas las empresas con proyectos nuevos de carbón. La exclusión del tabaco abarca tanto a los fabricantes como a sus proveedores.
“A lo largo de los años hemos asistido a una creciente preocupación en torno a la implicación en una gama de actividades controvertidas. En Candriam creemos que el coste sanitario, social y medioambiental son primordiales dentro de un análisis de riesgo/retorno. Extender nuestra estrategia de desinversión a nuestros fondos generales entra dentro de toda lógica, puesto que invertir en estas empresas es cada vez más incompatible con nuestros objetivos de riesgo/retorno y metas de sostenibilidad a largo plazo, como la barrera de los dos grados centígrados de temperatura”, explica Vincent Hamelink, director de inversiones de Candriam.
En este sentidio, Candriam tiene como objetivo posicionarse como líder dentro de la inversión socialmente responsable (ISR), que desarrolla desde hace más de 20 años. A lo largo de ese periodo ha ido construyendo uno de los mayores equipos de ISR dedicados en Europa y con el más amplio abanico de estrategias puramente ISR, representando el 30% de su patrimonio total gestionado. La gama de productos ISR de Candriam ya excluye las inversiones en carbón y tabaco, así como una serie de actividades controvertidas tales como contenido para adultos, alcohol, pruebas con animales, armas, apuestas, modificación genética, energía nuclear y presencia en regímenes opresivos.
A propósito de esta decisión, Naïm Abou-Jaoudé, CEO de Candriam y presidente de NYLIM International, ha señalado que “el hecho de excluir el carbón y el tabaco de nuestras inversiones convencionales forma parte de nuestro compromiso y anhelo por ser líderes en sostenibilidad. El carbón es la fuente energética que más contamina y el primer activo que se abandona en la transición energética. En cuanto al tabaco, sus efectos nocivos cada vez son más manifiestos. Reconocemos el papel importante que desempeñan los gestores de activos cuando se trata de abordar cuestiones cruciales a nivel mundial, como la salud o el medio ambiente. Nuestros gestores trabajarán en adelante conjuntamente con nuestro equipo ISR para garantizar que todos los fondos respondan a la nueva política.”
El motivo de estas exclusiones, según explica la firma, es el compromiso que Candriam ha ido adquiriendo recientemente, como el Día mundial sin tabaco, el Compromiso de Montreal sobre el carbono, la iniciativa Acción Climática 100+ o la agenda de inversores. Candriam está totalmente convencida de que las tendencias de sostenibilidad a largo plazo tienen un impacto crucial en la rentabilidad de las empresas y está dispuesta a asignar capital a sectores que no contribuyen a crear efectos adversos en la sociedad.