El gobierno argentino envió un proyecto de ley al Congreso que establece las condiciones para el canje de bonos en dólares con ley local. Es otro capítulo de la restructuración de la deuda argentina: bonos regidos por ley argentina que suman cerca de 46.000 millones de dólares, explica en un informe la firma Criteria.
“De este modo, el Gobierno busca reordenar el panorama de la deuda doméstica en un contexto donde la negociación con los acreedores internacionales –por la deuda en default ley extranjera- no encuentra todavía una resolución. En este nuevo menú de bonos están incluidos los Bonar, Par y Discount, así como también el remanente Letes y otros títulos en dólares”, señala el informe.
Los analistas de Criteria consideran que, “a diferencia de la discusión en el extranjero, una conversación por 66.000 millones de dólares adicionales de deuda, el canje local luce mucho más llevadero. Esto es así en gran medida porque la ley argentina no prevé en los contratos de deuda cláusulas de acción colectiva. Es decir, el ministro Guzmán no tendrá que buscar acuerdos y mayorías para avanzar: los antecedentes judiciales en defaults anteriores bastan como jurisprudencia”.
Distintos fallos de la Corte Suprema argentina a lo largo de los últimos 25 años, incluidos aquellos del canje de 2005, han convalidado jurídicamente la facultad del Ejecutivo para llevar a cabo canjes de deuda pública: “Así, el gobierno puede suspender y diferir servicios de deuda en distintos escenarios; en un contexto de emergencia pública (el Congreso aprobó la ley en diciembre), la operación luce blindada desde lo legal”.
¿Cuánto vale la oferta local?
“La propuesta nacional comprende una cesión de derechos sobre acreencias defaulteadas a cambio de nuevos títulos en dólares (idénticos a los ofrecidos en el canje externo) o bien bonos en pesos ajustables por inflación (CER) con vencimientos en 2026 y 2028 y un cupón anual de 2,00 y 2,25% respectivamente.
Estas opciones en pesos presentan un menor valor relativo que las denominadas en dólares, además de una variabilidad alta hasta la fecha del cierre del canje, dada la volatilidad del tipo de cambio a la hora de fijar valores en la moneda norteamericana”, explica el análisis de la firma argentina.
Tenedores de Letes, Bonar 2020 y 2024 podrán suscribir nuevos papeles con vencimiento en 2030 y 2035 (con quita de capital de 3%); los tenedores de Discount y Par conservarían capital, pero se aplazarían vencimientos a 2038 en el primer caso y a 2041 en el segundo. A su vez, al igual que en el canje externo, el gobierno crearía un bono para compensar intereses acumulados.
Según Criteria, los bosnitas que acepten la oferta tendrán el derecho a mejoras financieras que pudieran resultar de nuevos canjes en el futuro, aun si las mejoras son para la deuda con ley externa.
Frente externo: la oferta expira en agosto
La negociación con los acreedores de deuda ley internacional sigue su laborioso proceso: “El gobierno presentó una nueva propuesta de pago este mes: una proposición que hace enmiendas en la oferta original y cuyo período de suscripción expira el 4 de agosto. La oferta recibió apoyo de ciertos miembros de la comunidad internacional y del FMI, aunque todavía no consigue el apoyo necesario de los bonistas. Los grupos Ad-Hoc Bondholders y Exchange Bondholders rechazaron la propuesta. Si bien algunos acreedores están propensos a tomar el acuerdo, existen fondos que exigen mejoras financieras y, fundamentalmente, legales. De no conceder el Gobierno esos ajustes en la letra del contrato, la alternativa en pos de un acuerdo es una mayor compensación financiera”.
Así, desde posiciones iniciales antagónicas, diferencias de valor presente neto de 20 puntos, ambas partes de la negociación se acercaron notablemente en lo financiero. La brecha estaría ahora en el orden los 5 puntos.
“A medida que se extiende el período, Argentina agranda su condición de default selectivo ya que distintos bonos van cayendo en cesación de pagos. El último caso fue el servicio (no atendido) de 228 millones de dólares en bonos Birad, que vencían en la segunda semana de julio”, señalan desde Criteria.