El fondo AXA WF Euro Credit Total Return celebra su décimo aniversario, mostrando una sólida trayectoria y con un volumen de 3.000 millones de euros en activos bajo gestión, según explican desde AXA IM. Como fondo emblemático de AXA IM, ha demostrado su adaptabilidad a diversos ciclos económicos desde su lanzamiento, gracias a su enfoque de gestión flexible y diversificado. Este fondo refleja el creciente interés de los clientes por estrategias activas y flexibles, libres de las limitaciones tradicionales de los índices de renta fija.
Una gestión flexible “todoterreno” que aborda los principales retos de la última década mientras navega por los distintos ciclos del mercado, según han detallado desde la firma. La última década ha estado marcada por numerosas turbulencias e incertidumbres en los mercados, como el Brexit y las consecuencias económicas de la COVID-19, junto con rápidas fluctuaciones de los tipos de interés, presiones inflacionistas y cambios en las políticas monetarias de los bancos centrales a partir de 2022.
“AXA WF Euro Credit Total Return ha ajustado hábilmente sus posiciones sin verse limitado por un índice, aprovechando las oportunidades en varios segmentos del mercado. El modelo flexible del fondo aborda eficazmente las expectativas de los inversores a través de un riguroso análisis crediticio y la implementación de asignaciones sectoriales estratégicas. Al seleccionar cuidadosamente valores y posiciones de alta convicción, puede adaptarse a los riesgos de los tipos de interés y a las fluctuaciones económicas. Este enfoque también permite a los inversores obtener una exposición diversificada al crédito en euros que va más allá de los índices tradicionales de renta fija”, señalan desde la gestora.
Perspectivas del mercado de crédito euro
El aumento de las tensiones geopolíticas y las recientes políticas proteccionistas implementadas por Estados Unidos están ensombreciendo el optimismo del mercado de crédito en 2025, según AXA IM. La introducción de nuevas barreras comerciales repercutirá en los flujos comerciales, el comportamiento de los consumidores y las decisiones de inversión, lo que introducirá riesgos significativos para la estabilidad económica mundial.
En este contexto, los expertos de AXA IM explican que es necesario un enfoque de inversión más cauto y selectivo. La interacción entre las tensiones geopolíticas y las decisiones económicas de Estados Unidos está causando trastornos en los mercados y, al mismo tiempo, creando oportunidades en Europa, especialmente en los sectores que pueden beneficiarse de un mayor gasto público.
“Mantenemos una perspectiva constructiva en los mercados de crédito, especialmente en el caso de los bonos “Investment Grade” denominados en euros. Es crucial enfatizar la resiliencia crediticia a pesar de las continuas tensiones en el mercado de tipos de interés. Es probable que los diferenciales de crédito en euros se mantengan en los mismos niveles durante varios meses, respaldados por indicadores técnicos positivos y fundamentales sólidos. Se espera que el crecimiento europeo siga siendo débil, aunque positivo, mientras que la inflación debería seguir desacelerándose, lo que permitiría al Banco Central Europeo (BCE) aplicar nuevos recortes de los tipos de interés en 2025”, han explicado desde AXA IM.
En opinión de los expertos de AXA IM, la previsión es que la demanda de crédito siga siendo sólida, impulsada por el aplanamiento de las curvas de rendimientos, aunque podría verse influida por una disminución de los rendimientos absolutos.
“Este descenso también podría dar lugar a un aumento de las nuevas emisiones, lo que técnicamente podría pesar sobre la clase de activo. En este contexto, creemos que los bonos subordinados del sector financiero siguen presentando oportunidades atractivas, al igual que el sector inmobiliario, donde las perspectivas han mejorado debido a la caída de los tipos a corto plazo”, explican los expertos de la entidad.
Así, en este mes de marzo, los expertos de la firma optan por mejorar la calidad de sus carteras centrándose en el segmento intermedio de la curva de rendimientos, que ofrece el mejor perfil de riesgo-rendimiento. También favorecen a los sectores defensivos, que están menos expuestos a los riesgos comerciales y/o a las políticas agresivas de los accionistas, como los servicios públicos, las telecomunicaciones, el transporte y las finanzas. “Dentro del segmento de beta alta, incluyendo deuda subordinada o de alto rendimiento (high yield), también estamos poniendo un mayor énfasis en la calidad”, destacan los expertos de AXA IM.
“A medida que el BCE continúa su ciclo de flexibilización, anticipamos tasas más bajas y un probable rendimiento positivo para el crédito en euros en 2025. En un contexto marcado por la preocupación dentro de los países de la Eurozona por las divergencias en el crecimiento en Estados Unidos,, el aumento de la volatilidad de los tipos de interés y las incertidumbres económicas mundiales, AXA WF Euro Credit Total Return se posiciona como una solución de inversión a largo plazo que combina nuestra búsqueda de rentabilidad, flexibilidad y diversificación, al tiempo que continúa navegando de manera efectiva por los próximos ciclos del mercado”, declaró Boutaina Deixonne, responsable de Crédito Europeo IG y HY IG y HY de AXA IM.