Ana Patricia Botín debutó este lunes como presidenta de Banco Santander, en una intervención ante los accionistas con un recuerdo especial a su padre y anterior presidente del banco, Emilio Botín, fallecido la semana pasada a los 79 años. “En sus cerca de treinta años en la presidencia del banco, colocó al Santander como primera entidad de la eurozona y como uno de los diez primeros bancos del mundo en capitalización bursátil. Lo consiguió con una visión clara: prudente en los riesgos, centrada en el cliente y en la banca comercial, y con agilidad para adelantarse y aprovechar las oportunidades de crecimiento. Hoy, gracias a su visión, el Santander no sólo es más grande, sino más diversificado y más sólido, como lo prueba su resistencia a lo largo de la crisis financiera, siendo una de las tres únicas grandes entidades financieras que ha atravesado la crisis sin pérdidas en un solo trimestre”.
También subrayó que “su apoyo a iniciativas en el ámbito de la educación y la cultura ha sido sobresaliente, convirtiendo al Santander en una entidad de referencia por su compromiso con la universidad y con la sociedad, tanto española como con la de todos los mercados en los que está presente el banco. Mirando a futuro, seguiremos en línea con esta estrategia y trabajaremos para afianzar aún más la cultura Santander, que es la base del crecimiento sostenible. Se trata de una cultura centrada en la banca comercial, en estar cerca de los clientes y ofrecerles el mejor servicio, con la voluntad de contribuir al progreso económico y social. Mi ambición consiste en mantener esta trayectoria de éxito a la que voy a dedicar el mayor de mis esfuerzos”.
A continuación, la presidenta repasó los detalles de la oferta de adquisición de las acciones de la filial de Santander Brasil en manos de accionistas minoritarios. “Esta operación muestra la confianza del grupo en Brasil y en nuestra filial. Brasil es un gran país, con un fuerte potencial de crecimiento, con unas instituciones sólidas, un sector empresarial de calidad y un sistema financiero bien gestionado y supervisado. Todo ello nos hace confiar en el atractivo de la economía brasileña y en que superará el período de desaceleración económica por el que está pasando”. También destacó la confianza del grupo en “la capacidad de Banco Santander Brasil para impulsar sus resultados –que hoy representan el 20% del beneficio atribuido al grupo- rentabilizando adecuadamente nuestra inversión”.
Ana Botín recordó que “la operación es financieramente buena tanto para los accionistas de Santander Brasil como para los de la matriz, Banco Santander”. Para los primeros, puesto que reciben una prima del 20% y, además, lo perciben en acciones de Banco Santander. “Esto permitirá a los que acudan a la oferta seguir beneficiándose de las ventajas de la inversión del grupo en Brasil, además de participar de la fortaleza y diversificación de Banco Santander”.
La presidenta señaló que “con este paso afianzamos la diversificación geográfica de Banco Santander, que será clave para consolidar esta nueva fase de crecimiento de nuestros beneficios”.
“Me siento especialmente comprometida con este reto para el que cuento, además, con un gran equipo y el apoyo de un consejo de gran experiencia. Continuar con la trayectoria de éxito de las últimas décadas no será fácil: el nuevo entorno competitivo y el entorno regulatorio son cada vez más exigentes. Sin embargo, tenemos igualmente una gran oportunidad y asumo con gran confianza esta tarea que llevaremos a buen fin porque conozco bien a nuestros equipos, su compromiso con el Santander, su alta cualificación y su dedicación a nuestros clientes. Tengo total confianza en que juntos lograremos hacer del Santander, en cada uno de los mercados en los que operamos, la entidad de referencia para empleados, clientes, accionistas y la sociedad”.