La renta variable global se recuperó durante el primer trimestre de 2019, pero el camino fue pedregoso. AllianceBernstein hace hincapié en que, incluso en un mercado alcista, la volatilidad es un peligro claro y presente. Por ello, con tantos riesgos enturbiando el futuro resultado, los inversores deberían centrarse en generar un patrón de retornos más suave.
Cuando los mercados bursátiles sufrieron una caída a finales de 2018, la prioridad de muchos inversores era controlar la volatilidad. Sin embargo, cuando los mercados ascendieron en los tres primeros meses de 2019, la volatilidad parecía menos urgente.
Para AllianceBernstein, el contexto de turbulencias continúa. “De hecho, la volatilidad ha permanecido este año, incluso mientras se recuperaban las acciones”, asegura en un análisis recientemente publicado. La volatilidad diaria del MSCI ACWI Index fue del 11%, ligeramente inferior al 13% que registró durante la caída del mercado de 2018. El índice ascendió o cayó al menos un 1% cada ocho días durante el primer trimestre de 2019. A ese ritmo, podemos esperar 24 días más de fuertes ascensos o caídas hacia finales de año.
“Claramente, nos encontramos en un entorno mucho más turbulento que en 2017, cuando solo se registraron ganancias o pérdidas de más del 1% durante tres días seguidos”, afirma la gestora, que admite que hay indicadores que cuentan una historia diferente.
En esa línea, el VIX Index, que mide la volatilidad del mercado estadounidense, es bajo. Pero este índice captura expectativas futuras de volatilidad a corto plazo y no refleja la volatilidad real que han experimentado los inversores durante los cambios bruscos en los patrones comerciales.
Mantener las inversiones
Las grandes caídas pueden ser perturbadoras para los inversores, pero la venta masiva de renta variable cuando se produce una corrección del mercado suele ser un error. De hecho, los inversores que vendieron acciones durante la caída de finales de 2018 se hubieran beneficiado de los retornos que generó la recuperación de principios de este año.
Dado que es prácticamente imposible calcular los puntos de inflexión en el mercado, AllianceBernstein considera que mantenerse invertidos durante los episodios de volatilidad “es esencial para tener éxito”.
El Brexit, las guerras comerciales, la economía china y el crecimiento global son solo algunos de los riesgos que podrían continuar impulsando la volatilidad este año. En este contexto, la gestora considera importante apostar por estrategias de inversión que ayuden a los inversores a capturar buenas fuentes de potencial de crecimiento a largo plazo pero que también estén diseñadas para aportar resistencia frente a las caídas y crear un viaje de inversión más cómodo.
Ampliar el análisis de los riesgos
Existen peligros reales que piden un cambio en la forma de analizar el riesgo. El Brexit, la situación económica en China, la guerra comercial, la deuda global y el déficit estadounidense son cuestiones particularmente difíciles de abordar con la caja de herramientas tradicional del inversor en renta variable. Las decisiones políticas pueden no estar guiadas por una postura racional, centrada en la maximización de los beneficios.
En estas condiciones, es importante que los inversores amplíen su perspectiva a la hora de identificar los riesgos en las carteras. La mayoría de los análisis tradicionales de riesgo se centran en sectores, países o factores, pero cuando el ciclo económico no es el principal factor de riesgo, esta mirada podría perder de vista temáticas en evolución. La gestora asegura que alejarse de la rigidez de las herramientas estándar puede ayudar a los inversores a identificar estos nuevos patrones y correlaciones.
AB Low Volatility Equity Portfolio
Con todo, la estrategia de baja volatilidad en renta variable de AllianceBernstein apuesta por el crecimiento de capital a largo plazo mediante la inversión en una cartera de renta variable global que ofrezca potencial de rendimiento a largo plazo, al tiempo que limita la volatilidad y pone el énfasis en la protección.
El AB Low Volatility Equity Portfolio se basa en un enfoque bottom-up que combina el análisis de los fundamentales con herramientas cuantitativas propias para seleccionar activos atractivos y se centra en retorno y riesgo absoluto, sin hacer referencia un índice.
Según la gestora, es una estrategia interesante para inversores con mayor tolerancia al riesgo, interesados en los beneficios de la renta variable a medio y largo plazo. El fondo tiene una rentabilidad anual del 7,30% y una del 11,17% desde su concepción, en diciembre de 2012.