Es en los momentos de crisis e incertidumbre cuando los españoles desempolvan sus huchas y comienzan a llenarlas más que nunca. El coronavirus ha hecho que muchas familias aplacen decisiones de consumo y reserven sus ahorros para las posibles “vacas flacas”. Como resultado, las familias están ingresando sus ahorros financieros (ahorro en activos financieros) principalmente en depósitos, un vehículo caracterizado por su bajo nivel de riesgo, pero ahora también por la escasa rentabilidad que ofrece debido al entorno de bajos tipos de interés.
Según analiza Inverco, basándose en los datos emitidos por el Banco de España, en términos interanuales, y en un entorno de elevada incertidumbre con notable aversión al riesgo de las familias, el activo que presenta un mayor crecimiento son los depósitos/efectivo, que ya registra un aumento interanual del 7,7%, con la tasa de ahorro de los hogares en máximos históricos. De hecho, los depósitos representan casi el 42% del ahorro financiero de los hogares, acercándose a niveles de 2013. Desde Inverco también destacan el crecimiento de las Instituciones de Inversión Colectiva (fondos y sociedades de inversión), con un crecimiento trimestral del 1,7%.
Si embargo, el ahorro financiero ha menguado un poco en el último trimestre de 2020 si se compara con el anterior. Se situó en 2,31 billones de euros a finales de septiembre de 2020. En el tercer trimestre, los hogares españoles redujeron en 38.986 millones de euros su saldo en activos financieros, un 1,7% menos que en junio de este año.
Según explican desde Inverco, la reducción del volumen de activos financieros tuvo su origen tanto en los flujos negativos por operaciones como en un ajuste por valoración de los activos en cartera de los hogares. No obstante, la notable reducción del PIB en el primer trimestre permite que, en términos porcentuales, la ratio activos/PIB se mantenga por encima del 200% cerca de máximos históricos, aunque todavía lejos del 250% de la media de la zona euro.
En términos acumulados de los tres primeros trimestres, las nuevas operaciones de adquisición de activos financieros por parte de las familias alcanzaron los 60.510 millones de euros, cifra que no ocurría desde 2006, aunque sólo dos activos han concentrado la totalidad del interés de las familias españolas: los depósitos/efectivo y las IIC, sobre las que los hogares han realizado suscripciones de 7.703 millones de euros hasta septiembre
En el tercer trimestre del 2020 se observó un ligero descenso del endeudamiento de las familias españolas hasta los 754.804 millones de euros, manteniendo un ritmo de desapalancamiento similar al trimestre anterior (-1,7% anual). Todo ello permite situar la riqueza financiera neta de los hogares en los 1,56 billones de euros.