La firma de inversiones alemana Acatis Investments acaba de registrar y lanzar un nuevo fondo de renta variable asiática con el objetivo de aprovechar las oportunidades de inversión fruto de las perspectivas de crecimiento que hay sobre la región. De hecho, según la firma, China se convertirá en la mayor economía del mundo en 2030.
El nuevo fondo, Acatis Qilin Marco Polo Asien, será gestionado en colaboración con Quilin Capital, que proporcionará un análisis subyacente para la asignación de activos de la cartera. Según ha explicado la firma, su foco principal de inversión serán empresas privadas asiáticas y chinas, sin seguir ningún índice de referencia de la región. La firma ve en la región asiática una zona con mucho potencial para los inversores y destaca que, actualmente, China ya representa más del 10% de la capitalización del mercado bursátil mundial. De hecho las acciones chinas están sobre ponderadas en las carteras europeas.
“Hasta ahora, las inversiones en empresas chinas a menudo fracasaban debido a la falta de experiencia local. Ahora hemos encontrado al socio adecuado», destaca Hendrik Leber, fundador y director general de Acatis Investment, al referirse al valor que tiene su alianza con Quilin Capital. A esto se suma la experiencia de la propia firma alemana, ya que sus socios gerentes (Ingo Beyer von Morgenstern y Stefan Albrecht) cuenta con más de dos décadas de carrera profesional en el mercado chino.
Las inversiones se realizan principalmente en empresas privadas y no gubernamentales, que representan la mayor parte de los índices debido a su alta capitalización de mercado. Esto se traduce en una cartera que es independiente de la referencia. «Esta área representa la nueva Asia y, por lo tanto, el crecimiento futuro del continente», explica el Prof. Dr. Ingo Beyer von Morgenstern al describir el enfoque del fondo.
Según explica la firma, el proceso de inversión sigue un modelo de tres pasos que inician con el análisis del modelo de negocio de las compañías, su viabilidad futura y su posición en el mercado. “A esto le sigue el análisis de los indicadores como el PER, los flujos de efectivo, la relación con la deuda y su valor contable. Al final, el análisis del comportamiento financiero se aplica a todo el mercado para evaluar el mercado que a menudo es impulsado por los inversores minoristas. Este paso tiene como objetivo garantizar que los campeones de países y sectores puedan identificarse de manera sistemática”, concluyen desde la firma.