Aberdeen Standard Investments (ASI) acumula 23 años de experiencia en inversión en small caps, donde actualmente cuenta con 1.500 millones de euros bajo gestión. El director adjunto de pequeñas compañías de la entidad, Andrew Paisley, considera que se trata de un sector que, aunque afronte algo más de riesgo que el de las grandes empresas, lo compensa con los “rendimientos atractivos” que lleva registrando durante años. La clave reside en “centrarse en lo micro, no en lo macro” para encontrar firmas de alta calidad, capaces de obtener buena rentabilidad a largo plazo.
Durante la celebración de la Burns Night en Madrid, el gestor aseguró que, a nivel global, las pequeñas compañías han registrado rendimientos superiores a los de las de mayor tamaño desde 1955; en concreto, un 4% anual de media. De hecho, solo desde el 2000, han acumulado un retorno del 487% frente al 230% de las grandes empresas. Este “efecto small cap” no se encuentra concentrado, sino que se repite en todo el mundo, con Francia a la cabeza con un 5,3% de rendimiento superior, seguida de Japón (5%) y España (4,8%). Solo dos países registran retornos negativos: Hong Kong y Taiwan.
Paisley destacó que, pese a este rendimiento superior, las valoraciones de las pequeñas empresas europeas permanecen atractivas si se compara la ratio precio-beneficio con la media a 10 años de las grandes compañías. Asimismo, apuntó que existe una “concepción equivocada” de que las primeras necesariamente afrontan riesgos muy superiores a los de las segundas. “En un contexto europeo, las small caps británicas y de Europa sin el Reino Unido son algo más volátiles, pero, desde una perspectiva de rendimiento ajustado al riesgo, son mucho más atractivas”.
Con el fin de aprovechar las oportunidades que ofrece este sector, ASI invierte en empresas de alta calidad. En ese sentido, busca obtener “un retorno muy superior y un balance mucho más sólido” que el del índice de referencia. Para ello, evita aquellas firmas con pérdidas o negocios especulativos y apuesta por aspectos cualitativos, como el “pedigrí del equipo de gestión” o el ASG. Esto último es “fundamental”, ya que, según Paisley, se trata de un indicador de la calidad de una empresa y su ventaja competitiva sostenible en el tiempo.
Al seleccionar las empresas, la intención de ASI es invertir con una visión de al menos 3 a 5 años. Para encontrar aquellas de alta calidad con buenas perspectivas de rentabilidad a largo plazo, lo esencial es “no obsesionarse con lo macro y centrarse en lo micro, es decir: observar los fundamentales de las compañías a nivel individual”.
En ese sentido, Paisley hizo hincapié en que siempre existe algún problema político en Europa, por lo que siempre habrá motivos para preocuparse y, en consecuencia, perderse retornos atractivos. Sin embargo, las pequeñas empresas son capaces de crecer de manera “semi-independiente” al ciclo económico: “La macroeconomía las impactará en cierta forma, pero, si hay algo especial sobre ellas, serán capaces de crecer más rápido que la economía durante periodos mucho más largos”, afirmó.
Otra de las claves para hallar ese tipo de small caps reside en invertir en áreas de crecimiento estructural o “grandes mega-motores”. De ahí que, entre las 41 empresas que ASI tiene actualmente en cartera en el European Smaller Companies Fund, existan negocios vinculados al envejecimiento de la población, como el grupo geriátrico francés Orpea. También hay firmas que aprovechan las oportunidades ASG, como la holandesa Corbion –que manufactura bioplástico- o la suiza Komax –especializada en vehículos eléctricos-. “Con frecuencia, las small caps generan soluciones a las problemáticas de sostenibilidad que crean las compañías de mayor tamaño”, reveló Paisley.
Con esta filosofía, el European Smaller Companies Fund de la gestora ha logrado un rendimiento un 5,64% superior al FTSE Small Cap Developed Europe desde su lanzamiento, en septiembre de 2007. Mientras, el Global Smaller Companies ha obtenido un 3,21% más que el MSCI AC World Small Cap desde su creación en febrero de 2012.
“Nuestras compañías se encuentran en muy buena forma y están confiadas de que podrán cumplir con sus planes de negocio. Por ello, permanecemos cautelosamente optimistas hacia ellas”. Asimismo, Paisley señaló que, aunque cada vez más inversores institucionales han incrementado sus asignaciones a small caps, todavía es un sector que atrae pocas inversiones, algo, a su juicio, “injustificado” dado su perfil de retornos.