¿Qué debe hacer un centro financiero para evitar ser percibido como un paraíso fiscal? De acuerdo con Trinidad y Tobago, las calificaciones en el Índice Global de Centros Financieros (GFCI) dependen en gran medida de las percepciones de las personas involucradas en los servicios financieros. Estas percepciones se ven afectadas por la prensa, así como las acciones de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo (OCDE) y otros organismos internacionales.
En el GFCI 19, publicado en marzo de 2016, los centros financieros de las Islas Vírgenes Británicas, las Islas Caimán, Bermuda y las Bahamas sufrieron descensos significativos en sus calificaciones, así como Panamá que muestra la mayor caída de cualquiera de ellos. Las dependencias de la Corona británica de la Isla de Man y el Bailiajes de Jersey y Guernsey tuvieron una experiencia similar que la de Gibraltar, Malta, Mónaco y Liechtenstein también perdiendo reputación. Mirando hacia atrás en los últimos tres años, casi sin excepción, todos los centros del Caribe y las dependencias de la corona se han movido en la misma dirección en el GFCI – claramente afectados por los sentimientos y percepciones de la industria en el momento de la encuesta.
Si esto fuera poco, el reciente escándalo sobre los “Papeles de Panamá” ha llevado, sin duda, a la profundización de percepciones negativas. Según Trinidad y Tobago, hay tres rutas que un centro financiero puede seguir para evitar mayores caídas en perspectivas:
- Mantener un perfil bajo – es probable que muchos centros decidan que frente a una tormenta en medios, lo mejor es tener un perfil bajo y mantenerse fuera de las noticias tanto como sea posible. Una estrategia viable a corto plazo.
- Protestar – varios centros pueden proclamar su inocencia. Sin embargo el especificar una y otra vez que «no somos nosotros!» no gana mucha simpatía.
- Diferenciarse – una estrategia válida a largo plazo es llegar a ser un tipo diferente de centro financiero. Alentar a las finanzas con buenos propósitos y hacer que sea mucho más difícil para los lavadores de dinero y los evasores de impuestos el operar en su territorio de manera que cuando la próxima ola de publicidad negativa llegue (como seguramente lo hará), se tendrán pruebas de su inocencia.
El recién formado centro financiero de Trinidad y Tobago está siendo desarrollado usando normas y mejores prácticas para contar con un marco regulatorio basado en los principios y apoyado por la acción legal contra las empresas que violen las leyes y reglamentos. Este modelo ya se ha utilizado con éxito para establecer el Centro Financiero Internacional de Dubai. La legislación del centro de Trinidad y Tobago ha sido redactada y se encuentra en proceso de aprobación por parte de los legisladores.