Los expertos de la gestora española Welzia consideran que la recuperación tendrá forma de K, lo que indica que será desigual. “Esta crisis es de ganadores y perdedores tanto a nivel geográfico como sectorial. Lo tecnológico y lo presencial están llevando caminos distintos”, asegura Miguel Uceda, director de inversiones en Welzia. Pero insiste en que, en el momento en el que se resuelva la crisis sanitaria, los sectores y países que se han quedado atrás se recuperarán.
Para Uceda, uno de los resúmenes más claros de lo que pasa en 2020 es la volatilidad. “Vivimos niveles máximos de volatilidad y seguimos inmersos en un rango de volatilidad más alto de lo habitual. Es probable que veamos movimiento en los índices de +3 o -3 en las próximas semanas”, apunta.
Respecto al PIB, los expertos de la entidad prevén un “gran rebote” en el próximo trimestre. Sin embargo, a pesar de las señales de mejora, consideran que estamos lejos de la normalidad. “Nos aproximamos a ese momento de segunda ola y las vacunas no estarán disponibles hasta 2021, por lo que la potencial segunda ola es uno de los aspectos que tienen más relevancia”, ha advertido Uceda.
En cuanto a la recuperación de las bolsas, Uceda advierte de que el caso de España es especial. “Vivirlo día a día nos puede llevar a extrapolar nuestra situación a la evolución bursátil mundial y no es lo correcto”, señala. En Europa, admite que el menor peso de tecnológicas le ha llevado a estar por detrás de EE.UU. “No tenemos esos campeones, no existen las FAANG”, completa.
Sin embargo, en Estados Unidos también localiza riesgos latentes, en especial el resultado de las elecciones. “El miedo es que los demócratas ganen con tanta fuerza que puedan recuperar las dos cámaras”, apunta. Según explica, el mercado está más nervioso por la victoria de Biden ante una posible subida de impuestos. En cuanto a las relaciones con China, asegura que no habrá muchos cambios ya que ambos comparten la misma postura: America first.
Movimientos ágiles en las carteras
En cuanto a asignación de activos, han hecho pequeños giros en las carteras, justificando que “nunca vamos a ser una gestora value invertida en España”. Entre esos pequeños movimientos, se encuentra, por ejemplo, haber dejado de invertir en el Nasdaq para invertir en convertibles o haber desecho posiciones en algún fondo growth a fondos más generalistas, no value.
Según defienden los expertos de Welzia, el hecho de que un sector o zona geográfica sea barata no debería ser el único driver de decisión de inversión. “Si hubiésemos seguido ese argumento hubiésemos estado invertidos siempre en Europa, emergentes, España o en sectores puramente value que son los que están baratos”, apunta Uceda.
Asimismo, creen que los bancos centrales van a seguir dovish y con tipos de interés bajos durante bastante tiempo. “Esto afecta de alguna manera a las valoraciones, las cuales están altas. Pero no debería ser el único driver de decisión de inversión”, insiste. Respecto al efecto de las acciones de los bancos centrales, los expertos de Welzia advierten de que el combustible de los bancos centrales puede calentar demasiado la máquina. “Dan alas a los mercados y hay que estar atentos a los daños colaterales. No hay que perder la visión a largo plazo”, aconseja Uceda.
Respecto a sus movimientos en cartera, los expertos de Welzia describen sus fondos como ágiles, lo que les permite invertir y desinvertir con rapidez para sortear las curvas. “Desde los últimos tiempos hemos apostado por la liquidez de los activos que tenemos invertidos y hemos huido de los ilíquidos que en marzo mostraron su cara más negativa”, explica. Pese a su coste, que denominan de “oportunidad”, ven la liquidez como un medio para evitar grandes caídas.
En este sentido, Uceda considera que una de las claves ha sido apostar por la liquidez de los productos y no tener excesivo peso en high yield. “Estábamos muy poco invertidos, a raíz de la crisis cargamos las carteras de crédito”, añaden. Sin embargo, consideran que a partir de ahora será más difícil ver esa apreciación dado que las yield absolutas han caído por la presión de las bajadas de tipos en EE.UU. “Es más juego de carry que de apreciación pura y dura de los activos”, añade.