La agitación que dominó los mercados en las primeras semanas de 2016 se tornó el mes pasado en una intensa recuperación de los activos de riesgo. El pesimismo extremo, unido a una percepción de menor riesgo, se tradujo en un drástico giro de la renta variable, el sector inmobiliario y las materias primas. De cara al futuro, el equipo de análisis de NN Investment Partners cree que el crecimiento —modesto pero incesante— y las elevadas primas de riesgo seguirán suscitando el interés por los activos que ofrezcan mayor rendimiento.
Pero lo cierto es que los mercados se han calmado algo en las últimas semanas. Un factor que la gestora holandesa achaca a que los inversores parecen haberse dado cuenta de que el crecimiento se ha vuelto más modesto que en el pasado, además de haber quedado ahora claro que la probabilidad de que este año se contraiga la actividad global es mucho menor que la descontada en las cotizaciones durante la mayor parte de los dos primeros meses del año. La economía global sigue remontando como puede, con frecuentes «miniciclos» impulsados por factores como las medidas de los bancos centrales, acontecimientos de orden político y la confianza de consumidores, empresas e inversores.
“La reciente recuperación de los activos de riesgo”, escribe NN IP en su análisis mensual, “siguió a un cambio de tendencia en los precios del petróleo, a unos datos macroeconómicos mejores de lo esperado en EE.UU. y a un menor temor a una ralentización descontrolada de la economía china tras las últimas medidas adoptadas. La prima de riesgo de la renta variable, por su parte, se sitúa por encima de su media de los últimos 10 años. Indicadores de confianza tales como el ratio put/call y el índice Bull minus Bear (inversores particulares alcistas menos bajistas) se han recuperado desde niveles deprimidos, y la última profundización en las medidas de política no convencionales del Banco Central Europeo (BCE) está empujando a los inversores a escalar por la curva de riesgo”, dice la firma.
Para los expertos de NN IP, el tema de la «búsqueda de rendimientos» resurgirá una vez que vuelvan a apaciguarse factores de pánico transitorios. Las elevadas primas de riesgo y el crecimiento moderado -pero constante- seguirán alimentando la sed de activos con mayores rendimientos, especialmente con el constante apoyo en forma de liquidez prestado por los bancos centrales, la que brindará financiación abundante para esta búsqueda de rendimientos.
“Tras otra decidida prueba del compromiso del BCE de proveer liquidez, decidimos elevar la recomendación de aquellas clases de activos que probablemente sacarán provecho de la resistencia del crecimiento y del ansia de los inversores por obtener rendimientos: la renta fija privada y el sector inmobiliario global”, explica NN IP.