Bajo la premisa de que a largo plazo la cotización de las acciones sigue a la evolución de los beneficios empresariales, Daniel Kranson, gestor del fondo Vontobel Fund European Equity, asegura que “al mercado no podemos controlarlo, pero lo que sí podemos controlar es invertir en las compañías correctas”.
En este sentido, el fondo de renta variable europea de la gestora tiene un claro sesgo hacia empresas de calidad que cotizan a precios razonables. Sus principios de inversión pasan por un enfoque a largo plazo focalizado en proteger y fomentar el crecimiento de los activos y por dotarse de la paciencia necesaria para permitir que esas compañías aumenten sus beneficios a largo plazo.
Con una filosofía 100% stock picking, el fondo tiene más del 40% de su cartera invertida en el sector de consumo básico, casi el 16% en sector salud y un 12% en consumo discrecional. El gestor justifica la concentración en estos tres sectores por el aumento del consumo en Reino Unido, el país al que está más expuesto, y porque “en Europa los ciudadanos se interesan más por tomarse una cerveza o fumar un cigarrillo que por cuestiones como el Brexit”.
En su opinión, “la concentración no es el objetivo: el equipo busca sectores de crecimiento y ahora está en el consumo básico. Además, el beneficio de invertir en consumo básico es que se trata de marcas estables”. Así, en el top ten de mayor exposición están títulos como British American Tobacco, Reckitt Benckiser Group, Philip Morris, Nestlé o Unilever. Kranson destaca el caso de Nestlé, con 32 marcas, operando en 197 países, con un 44% de sus ingresos procediendo de mercados emergentes y un ratio de deuda del 30%.
Otro ejemplo es Domino’s Pizza, líderes en el mercado en Reino Unido y la única compañía en la que están expuestos a la libra, un asunto que no les preocupa puesto que se trata de una compañía con sólidos resultados y muy atractiva para los consumidores británicos. En cuanto a las valoraciones, Kranson reconoce que no le importa pagar un precio que para el consenso de mercado podría ser considerado como algo elevado siempre que vea valor en el título.
Al experto le gustan las compañías bien gestionadas, que operan en mercados con fuertes barreras de entrada, sólidos flujos de caja y que inviertan una parte de su ROE en la propia entidad, algo que les permita seguir creciendo en el futuro. En este sentido, explica cómo en el sector de consumo básico el ROE medio de su índice de referencia (MSCI Europe Staples) se sitúa por debajo del 20% mientras que su selección de compañías de este sector tiene un ROE que roza el 35%.