España ya partía de una situación vulnerable antes de enfrentarse al COVID-19, así lo ha defendido Daniel Lacalle, doctor en economía y economista jefe de Tressis, durante el evento de la presentación de la revista de EFPA España. Según recuerda, en 2019 y a principios de 2020, antes de la pandemia, la perspectiva más optimista era de un crecimiento del 1,2%. Además, antes de la pandemia, el 60% de las empresas, según la Agencia Tributaria, estaba en pérdidas. “Cuando hacemos estimaciones para 2021 no debemos caer en los errores del pasado de hablar de recuperaciones en V, un concepto que si se analizan recesiones pasadas es más bien una L”, explica.
Las perspectivas, por lo tanto, y a ojos de Lacalle, son de una salida de la crisis lenta, con un nivel de endeudamiento y rapidez de generación de deuda récords y una creación de empleo preocupante. “Históricamente, para salir de la crisis España tira de tres palancas: llegada de flujo de fondos del extranjero vía turismo, vía inversión y el acceso a crédito. Dos de esas palancas no funcionan en esta crisis y las intentan compensar con un aumento enorme del gasto público”, explica el experto de Tressis.
Respecto a las herramientas usadas por el gobierno y la UE para mitigar los efectos de la pandemia, Tresiss advierte que, aunque el mensaje sea el contrario, se están usando las mismas que en 2008, por lo que el resultado será similar. “Estamos tirando de un enorme endeudamientos, aumento del gasto público y fiándolo a unas supuestas evidencias de llegada de fondos mágicos por parte de la UE, se está tirando de avales y se fía a los bajos tipos de interés que es lo que se hizo en las crisis anteriores”, expresa.
Asimismo, señala que tenemos que atender a los problemas estructurales de la economía española, como, según enumera, el “insignificante” tamaño de las empresas españolas, lo que complica la salida de la crisis, la baja productividad y crecimiento y la compensación de los problemas de capital circulante con endeudamiento. “Tenemos que ser cautelosos para que no se convierta en un problema de crisis financiera”, señala.
Para concluir, Lacalle pronostica que el PIB se recuperará en 2 o 3 años, pero para ello habrá que “atraer inversión, fortalecer la capacidad de invertir de la economía española y hacerlo cercenando trabas burocráticas y no cayendo en la trampa de pensar que los fondos de la UE van a ser la solución a problemas estructurales”.
Las peculiaridades de una recesión pandémica
Por su parte, Antón Costas, catedrático de política económica en la UB y presidente de la Fundació Cercle d’ Economía, se ha centrado en las características que hacen que esta crisis sea diferente a las vividas con anterioridad. “No es un tipo de economía frecuente en la historia, por lo que recomiendo a los gobiernos la estrategia de las 3Rs: resistencia, recuperación y reinvención».
Respecto al primer punto, resistencia, Costas considera que las medidas tomadas por el gobierno han sido las adecuadas pero no su intensidad. A corto plazo, distingue tres tipos de medidas para resistir. Las primeras son las medidas laborales, financieras y fiscales. “Su sentido es corrector, pero, en nuestro caso, por nuestra menor capacidad fiscal, la pólvora que hemos gastado no es suficiente”, explica.
Estas vienen acompañadas de las medias sanitarias, donde Costas considera que las medidas de seguimiento y aislamiento han sido muy deficientes, lo que supone “un lastre muy importante” debido a que gracias a nuestra escasa capacidad de rastreo y protección nos vemos obligados a usar en demasía medidas restrictivas. “A corto plazo, estas medidas restrictivas las podemos ver como un seguro colectivo para evitar muertes, pero este seguro tiene una prima muy elevada y de momento la están pagando aquellas actividades que se las obliga a cerrar. A corto plazo, este desequilibrio entre medidas restrictivas y sanitarias no lo podemos reequilibrar, pero vendrán otras pandemias y deberíamos estar aprendiendo y preparándonos”, aconseja.
En cuanto a la recuperación, Costas ha señalado que una recuperación pandémica se caracteriza por su asimetría. “Una recesión es como una bajada de la marea que deja a la mayor parte de los barcos varados en la arena. Cuando los gobiernos son capaces de llevar políticas expansivas, estas funcionan como la subida del mar y en una recesión normal reflotan los barcos. Esto no ocurre en una economía pandémica, donde hay dos mareas: una que consigue elevar algunos barcos y otra que no aparece hoy y que provoca que muchos sectores se queden varados durante un tiempo largo o de forma permanente”, ejemplifica.
Respecto a la última R, reinvención, Costas lo ha comparado con la crisis del petróleo de los 70. “El virus es un shock externo equivalente a lo que fue el shock de aumento de los precios del petróleo de los 70, este alteró las condiciones competitivas de muchos sectores de la economía española, de la misma manera el virus altera uno de los costes más importantes de aquellos negocios que están cerca de los consumidores finales”, explica.
Esa alteración del coste es una alteración de su capacidad competitiva, por lo que, según explica Costas, todos los negocios tendrán que invertir para asegurar la protección de sus trabajadores y clientes y adecuarse a las nuevas tendencias del consumo, ahorro e inversión. “Hay que reinventarse. No creo que esta R la estemos contemplando con toda su intensidad”, advierte.
EFPA España presenta su revista
EFPA España ha presentado su nueva revista, una publicación que tendrá carácter trimestral y estará dirigida tanto a los asesores financieros como al resto de la industria. Según ha comentado Fernando Ibáñez, presidente de ASEAFI, el asesoramiento financiero se encuentra en un momento histórico y se enfrenta a grandes retos como la digitalización, la ISR y la regulación que continúa marcando su devenir, todo esto sumado al COVID.
“En este entorno es crítico que tengamos iniciativas como la de EFPA donde podamos debatir y consensuar la orientación de nuestros sector para que podamos mejorar el valor que generamos a nuestros clientes y que la sociedad perciba que el asesoramiento es un servicio necesario y que hace que avancemos a una sociedad más justa”.
Por su parte, Josep Soler, consejero delegado de EFPA y editor de la revista, ha señalado que a través de esta publicación quieren explicar la realidad financiera tan cambiante a los asesores financieros, quienes sufren más que nadie estos cambios tan tremendos que experimenta el sector. “También queremos explicar la realidad de estos profesionales al resto del sector financiero. Queremos que sea un instrumento de comunicación con y entre los asesores, pero también de formación continua. Esta revista aparece en momentos de grande incertidumbre y muchos cambios, justo cuando es más necesaria”, apunta.
La revista tendrá una versión digital y otra en papel, una decisión que Rafael Rubio, director de la revista ha justificado asegurando que en EFPA confían en el papel como soporte de contenido. «El papel es el mejor medio y seguirá siendo el mejor soporte para la lectura relajada y para la reflexión, de ahí esta apuesta, tal vez a contracorriente, que hacemos con la revista».