En los últimos 18 meses, los inversores en empresas europeas de pequeña capitalización han visto recompensas inéditas con un rendimiento constantemente superior y un crecimiento de ganancias persistentemente más alto que el de sus homólogos de gran capitalización. Pero, según se plantea Ian Ormiston, gestor de Merian European (ex UK) Smaller Companies Fund, de Merian Global Investors, puede que esta tendencia esté a punto de cambiar.
“Después de haberse reducido de forma gradual desde principios del milenio, el coste de la deuda ya no está bajando; de hecho, la tendencia se está revirtiendo. Al mismo tiempo, y por primera vez en mucho tiempo, ciertas áreas del mercado de pequeña capitalización parecen caras: ¿se está acabando la racha ganadora de las empresas europeas de pequeña capitalización?”, señala Ormiston.
En su último análisis señala que hay varios factores han contribuido a las casi dos décadas de alegría relativa para las empresas de pequeña capitalización: la subida de los mercados de valores, las valoraciones atractivas, los aumentos en las ganancias y, sobre todo, una reducción en el coste global del riesgo. “De hecho, es el coste del riesgo lo que ha hecho bajar la prima de riesgo de la renta variable y ha tenido un impacto desproporcionadamente grande sobre las empresas de pequeña capitalización”, aclara.
Ahora, ya empezado un nuevo año y con un crecimiento global que se frena, la pregunta es: ¿cuáles de estos factores permanecen intactos en 2019? “El ascenso vertiginoso de los mercados de valores se ha terminado y el coste del riesgo finalmente ha empezado a subir. En cambio, las valoraciones ya son más atractivas en vista de las ventas que vimos durante el 2018, y las ganancias han seguido creciendo, lo que esperamos que continúe en el 2019”, añade.
A la hora de valorar las perspectivas para este año, estima un crecimiento económico global y europeo lento pero constante, unos presupuestos gubernamentales de expansión moderada, una política acomodaticia del Banco Central Europeo y un euro débil son elementos que apoyan el avance de la clase de activos. Con este telón de fondo, Ormiston apunta que, en el mundo de empresas de pequeña capitalización, “el crecimiento de las empresas de primer nivel ocurre tradicionalmente a un ritmo mayor que el crecimiento nominal del PIB; con las previsiones de que la economía europea crezca un 3% en el próximo año, esto sigue ofreciendo unas expectativas perfectamente realistas para las empresas de pequeña capitalización de la región”.