En los últimos años, la demanda de deuda investment grade en dólares estadounidenses ha crecido en todo el mundo. Muchos inversores han prestado atención a este mercado por el atractivo diferencial de rentabilidad, el conjunto de grandes y diversas oportunidades y la ausencia de volatilidad en el tipo de cambio. Las perspectivas para la economía estadounidense, dada la política fiscal y regulatoria anticipada por Trump, deberían apoyar la fortaleza del dólar estadounidense y los mayores diferenciales de rendimiento, que PineBridge espera que continúen impulsando la demanda de crédito investment grade en dólares estadounidenses.
En esta entrevista, Robert Vanden Assem, managing director y responsable de mercados desarrollados de renta fija investment gradede PineBridge, analiza las preguntas más frecuentes sobre la inversión en el crédito investment grade en dólares, el mercado de crédito más líquido del mundo.
¿Qué significa los resultados de las elecciones en Estados Unidos para los mercados de renta fija?
En general, esperamos sobre todo las consecuencias positivas de una presidencia de Donald Trump en productos denominados en dólares estadounidenses. Los recortes de impuestos, el posible gasto en infraestructura, la repatriación de efectivo en el extranjero y la reducción de la regulación son factores positivos para los mercados corporativos.
El resultado de las elecciones también ha hecho que algunos sectores sean más atractivos. El sector financiero se vio golpeado el año pasado por la posibilidad de tasas negativas, y ahora que los tipos de interés van a subir y que es probable que haya una flexibilización de la regulación, se prepara para ser uno de los sectores más atractivos en renta fija.
El sector aeroespacial y de defensa parece estar en condiciones de beneficiarse de un aumento global del gasto militar, el sector de los metales y la minería debería beneficiarse de un aumento del gasto en infraestructura y los sectores de la energía y las comunicaciones deberían beneficiarse de un enfoque más suave con sus respectivos organismos reguladores.
Por último, vemos posibles resultados positivos para las empresas en forma de recortes de impuestos, menos regulación y la posible repatriación de efectivo en el extranjero.
¿Y que va a pasar con el dólar?
El resultado de las elecciones también dio un impulso al dólar estadounidense, que había estado cotizando en un rango estrecho desde diciembre pasado. Creemos que, en el futuro, un dólar fuerte y estable contribuirá al desempeño de la renta fija denominada en dólares estadounidenses.
En lo que respecta a la volatilidad por los tipos de interés, la perspectiva de un estímulo fiscal y menos regulación ya ha impactado en nuestros mercados. El reciente respaldo en los tipos ha proporcionado una oportunidad para invertir en niveles de rendimiento más atractivos.
¿Qué riesgos se ve de cara al futuro?
Creo que un riesgo clave en este punto podría ser un exceso de optimismo en los mercados. Más allá de los factores positivos obvios de más gasto fiscal y menos regulación, lo que la Reserva Federal hace en respuesta es algo a tener en cuenta.
Nuestra opinión desde hace mucho tiempo ha sido la de que la Fed no puede normalizar la política a menos que haya una corrección adecuada en términos de política fiscal y reguladora dentro de la economía. Por supuesto, ahora tenemos la esperanza de que podamos ver eso, pero todavía hay incertidumbre respecto a cuáles serán los programas exactos y su probabilidad de éxito. Es importante destacar que Estados Unidos todavía tiene que lidiar con enormes niveles de deuda que siguen aumentando.
¿Qué área de renta fija prefiere ahora mismo?
El sector financiero ha sido uno de nuestros favoritos, pero sufrieron en el último año debido al temor de tasas bajas o incluso negativas de los tipos de interés.
De cara al futuro, somos positivos en el sector por dos razones. En primer lugar, ha superado en rentabilidad al resto del mercado y parece atractivo sobre una base de valor relativo. Segundo, con la perspectiva de una menor regulación y unos tipos de interés más altos, debería haber más oportunidades para que los bancos aumenten la rentabilidad en el futuro. Recientemente, hemos visto un interés mayor en el sector financiero.
¿Cuáles son sus perspectivas para 2017?
A pesar de los cambios a favor del crecimiento que veremos probablemente en la política fiscal y reguladora, pensamos que el entorno de tipos de interés no va a cambiar significativamente. Además, esperamos que continúe la búsqueda global de rentabilidad. Mientras Estados Unidos está viendo desarrollos positivos, muchas economías avanzadas todavía están lidiando con un crecimiento bajo, una inflación baja y un aumento en el riesgo geopolítico. Por lo tanto, pensamos que el mercado no está preparado para el crecimiento que muchos inversores parecen estar anticipando en este momento.