La Fundación Telefónica acaba de publicar “Smart Energy. TIC y Energía: Un Futuro Eficiente”. El monográfico propone el nuevo modelo de sistema energético, en donde el usuario ocupa el lugar central y en donde las redes de comunicación interaccionan con las redes de distribución energética tradicionales. Las Smart Grids o Redes Inteligentes de Distribución, constituyen la columna vertebral que abrirá nuevas posibilidades a la sociedad hasta ahora desconocidas. Lo que sigue es la sisntesis principal de este monográfico.
Uno de los aspectos fundamentales para que una sociedad pueda desarrollarse es la existencia de un sistema energético eficiente, que garantice el suministro de energía a precios razonables, y que facilite la actividad económica y el crecimiento. Durante el último siglo, varios factores, cómo el aumento demográfico en el planeta, el crecimiento económico sostenido, ó la escasez de combustibles fósiles, han ido sometiendo a este sistema a numerosas tensiones que se han llegado a traducir en crisis económicas e incluso conflictos entre naciones.
Se han buscado soluciones, como la mejora de la eficiencia en el consumo o el desarrollo de una gran gama de tecnologías que permiten captar energía del ambiente, las denominadas energías renovables. Todo ello ha supuesto un balón de oxígeno permitiendo estirar el modelo actual, aunque empieza a haber consenso de que no es suficiente para mantener el ritmo de crecimiento de la actividad del planeta, sobre todo de los países del Este de Asia.
Nos encontramos por tanto en una época en la que el sistema energético se enfrenta a enormes retos que le obligarán a dar soluciones en un nuevo contexto económico y social, y que deberá basarse en criterios de sostenibilidad que permitan un crecimiento duradero. En esta situación, nuevas tecnologías como las que sustentan el vehículo eléctrico, los smartphones, o la comunicación máquina a máquina (M2M), han alcanzado un grado de madurez suficiente para integrarse en la estructura del sistema energético, provocando más su transformación que una mera evolución.
El Futuro de las Smart Energy
El desarrollo de nuestra sociedad demanda cada vez más energía debido al consumo creciente de una población tecnificada y a los incrementos de demanda del sector industrial, sobre todo en los países emergentes, donde se está disparando sin que las fuentes de energía sean capaces de crecer al ritmo que se les exige. Por ello cada vez adquirirá más importancia el concepto de Smart Energy, que permite racionalizar el consumo de energía gracias a la confluencia de diferentes factores y tecnologías que posibilitan, de forma inteligente, aprovechar al máximo la energía disponible.
Se espera que el año 2020 sea el momento en el que se consolide este nuevo modelo energético, en el que conceptos como smart metering, smart grid, coche eléctrico y microgeneración ya se encuentren implantados.
Esta evolución no acabará aquí. Ya se empieza a apuntar una tendencia hacia un sistema más abierto que se consolidará durante los próximos años, y que podría dar lugar a un nuevo concepto de «Open Smart Energy», en el que todos los elementos estarán integrados, tanto en la parte de producción, como de almacenamiento y consumo, y donde los usuarios colaborarán de forma decisiva al equilibrio de la red, dando lugar a una especie de inteligencia colectiva.
Esta tendencia dará lugar a nuevos escenarios como:
- Un hogar plenamente inteligente. Gracias a la incorporación de inteligencia en todos los dispositivos del hogar y al avance de estándares abiertos que faciliten su interconexión,
- Gestión inteligente de las redes de distribución y medición. Los smart meters estarán instalados en todos los hogares y empresas, y facilitarán un mejor y mayor control de la distribución y el consumo
- El impacto creciente de las redes sociales en un consumo inteligente. Las redes sociales adquirirán un papel protagonista en el comportamiento de los usuarios y en lograr patrones de uso más responsables.
- El coche eléctrico se convertirá en una pieza más de la red eléctrica. Si bien el coche eléctrico está todavía en sus fases iniciales, es de esperar que su número crezca exponencialmente en los próximos años. Ello provocará que se integre en las redes eléctricas un elemento nuevo que puede contribuir decisivamente a una gestión más inteligente de las mismas.
- La integración de todos los elementos en la red. Ésta es posiblemente la pieza más importante ya que la verdadera inteligencia vendrá cuando todos los elementos de la cadena de producción, distribución, almacenamiento y consumo actúen de forma integrada.