Silk Invest, gestora de activos británica especializada en la inversión en mercados frontera, llevaba tiempo trabajando con clientes españoles pero acaba de dar un paso más, al decidir registrar formalmente, y por primera vez, sus fondos en la CNMV, el supervisor de mercados español.
Con el paso dado, Silk Invest se convierte en la segunda entidad internacional que aterriza en España en 2014 para comercializar sus productos, después de la reciente llegada de la irlandesa KBI, y tras un 2013 que dejó más de una veintena de nuevas entidades (22 en total) en el mercado. Especializada en mercados frontera, la entidad ha llevado a España sus estrategias de renta fija y renta variable africana.
Aunque el momento es delicado para los mercados emergentes y aunque pudiera parecer que el timming elegido no es acertado, Baldwin Berges, socio de Silk Invest, considera que éste es, precisamente, un buen momento puesto que los mercados frontera, en esta crisis, han aguantado muy bien. “Muchos emergentes deberían reconocer que ya no lo son, que han pasado de jóvenes a adultos y que, debido a su fuerte conexión con el mundo, presentan numerosos desafíos, como también lo afronta el mundo desarrollado”, explica. Desafíos que pasan por la captación del capital global, por el que compiten junto a Europa o EE.UU.
Pero, al margen de esos emergentes que ya han entrado “en la escala VIP de las economías”, los mercados frontera aún están “en la adolescencia”, presentan un crecimiento intensivo y la mayoría de sus flujos de capitales son domésticos, lo que les hace menos vulnerables a estos vaivenes del capital internacional. “Están dominados por fondos de pensiones e inversiones locales y por eso han sufrido menos en la última corrección”, explica Berges, recordando la buena racha para mercados de África u Oriente Medio, en los que invierte.
Así, Berges explica que, a pesar de que cada vez hay más entidades con interés de invertir en la zona y la inversión es cada vez menos exótica, la liquidez es limitada, con lo que no se puede dar una saturación de flujos internacionales. “Los inversores internacionales están empezando a asignar capital pero son los locales los que mandan”, dice, y compara su situación con la de otros países como Turquía, donde más de la mitad de los flujos de capital son de inversores extranjeros. En sus estrategias (cuatro fondos UCITS, un fondo de capital riesgo, un fondo estadounidense que invierte en mercados frontera y varios mandatos que invierten en mercados africanos y de Oriente Medio, fundamentalmente) tienen unos 150 millones de euros bajo gestión.
Llegar a la banca privada española
La entidad, que tiene sus fondos registrados en varios países europeos y está registrada en Reino Unido, Dubai, EE.UU. y Marruecos, pretende llegar a más capas de inversores españoles. “Nos gustaría acceder a la banca privada. Nos han pedido que nos registráramos y eso hemos hecho, por el interés que vemos en estos mercados”, explica el socio. Con todo, reconoce que sus productos son “para inversores avanzados”.
Con el Silk Africa Lions Fund, de renta variable africana, y el Silk Africa Sovereing Bond Fund, de renta fija, pretenden aportar al inversor diversificación y rentabilidad. “Las compañías en las que invierte el fondo bursátil tienen márgenes muy sanos, grandes beneficios y perspectivas de crecimiento. Tratamos de elegir negocios relacionados con el consumo, de sectores como el de alimentación, telecomunicaciones o bancario porque las clases medias crecen muy deprisa y creemos que es ahí donde está la oportunidad principal”, explica Berges, añadiendo que no ofrecen la historia de las materias primas. En su fondo tienen un importante peso países como Nigeria, Marruecos, Egipto, Kenia o Suráfrica, pero también otros como Ghana, Botswana, isla Mauricio o Senegal, mercados que abordan con una gestión muy activa.
El fondo de renta fija invierte en deuda pública africana, en divisa local, principalmente posicionado en ocho países que cuya rentabilidad media supera el 10%, y países que ofrecen retornos por encima de la inflación. “El fondo puede aportar una alta rentabilidad en renta fija, logrando diversificar los factores de riesgo”, explica Berges.