A pesar de la reciente volatilidad, el sector mundial de la tecnología sigue mostrando unos sólidos fundamentales frente a otros sectores y una gran variedad de oportunidades de inversión con valoraciones atractivas y vinculadas a tendencias tecnológicas a largo plazo. A continuación, el gestor del fondo FF Global Technology de Fidelity International, Hyun Ho Sohn, analiza las claves de la industria durante este año.
¿Cuáles son tus perspectivas para el sector mundial de la tecnología en 2019?
Los valores tecnológicos han escalado un “muro de preocupación” este año por las inquietudes de tipo normativo, las crecientes tensiones comerciales entre EE.UU. y China y las incertidumbres en torno al crecimiento mundial. A pesar de estas dificultades, los motores a largo plazo del sector no han cambiado. Los indicadores financieros del sector, como los beneficios, los márgenes, los niveles de deuda, etc., son muy sólidos comparados con los de otros sectores. Sigue habiendo una amplia variedad de negocios para invertir que están expuestos a tendencias estructurales y cotizan con valoraciones atractivas. He aprovechado en parte los retrocesos que han sufridos los mercados recientemente para tomar o reforzar posiciones. Aunque a algunos inversores les preocupan las elevadas valoraciones del sector tecnológico, desde una óptica relativa e histórica el sector sigue siendo atractivo comparado con otras áreas, ya que se beneficia de tendencias de crecimiento a largo plazo y unos fundamentales empresariales muy firmes. Todo ello pinta un panorama positivo para el sector.
¿Qué crees que podría sorprender más a los inversores el próximo año?
Creo que los inversores valorarán cada vez más que el sector tiene mucho más que ofrecer que los grandes valores más conocidos (FAANG, etc.). El mercado extremadamente estrecho y movido por el momento que vimos en 2017 y gran parte de este año resulta relativamente inusual, pero ha condicionado a los inversores para esperar más de lo mismo en el futuro. Creo que eso es improbable, ya que posiblemente veamos un cambio hacia unos niveles de amplitud de mercado más normales en 2019 y, por tanto, una mayor variedad de valores al frente del sector tecnológico. El alejamiento de la apuesta por el momento y un pequeño número de megavalores sería positivo para el fondo, por su sesgo ligeramente contrario al momento y mi preferencia por las empresas de pequeña y mediana capitalización.
Por el contrario, el mal comportamiento de los FAANG, evidente en las fuertes caídas de octubre, podría continuar perfectamente el próximo año. El fondo sigue infraponderado en la mayoría de títulos FAANG o no los tiene en cartera (excepto por la sobreponderación en Alphabet). Soy cauto ante la mayoría de estos gigantes, ya que la creciente rivalidad entre ellos y el aumento de las exigencias normativas les obligarán a realizar más inversiones y asumir más costes, lo que lastrará las rentabilidades empresariales. Las valoraciones de algunas de estas empresas también son excesivas y dejan poco margen para las decepciones cuando se presentan resultados (como ocurrió con la reacción del mercado a las últimas cifras publicadas por Amazon).
¿Cómo pretendes aprovechar las mejores oportunidades?
La innovación del sector ofrece muchas temáticas para invertir. Los vehículos autónomos y eléctricos, la IA y la robótica están dando sus primeros pasos; los semiconductores son un elemento esencial para estas tecnologías y un subsector donde el fondo está sobreponderado. El crecimiento estructural del uso de Internet y el comercio electrónico continúa en todo el mundo, con un incremento importante en el tráfico de Internet a través del móvil. En el plano empresarial, se está invirtiendo con decisión en las TI. La combinación del big data y el Internet de las cosas hace que las TI se integren en un abanico cada vez más amplio de dispositivos inteligentes. Estas dos tecnologías están posibilitando una revolución en la producción automatizada (“Revolución Industrial 4.0”). He ido reforzando posiciones en empresas de juegos a la vista de la ampliación (demográficamente hablando) del mercado de juegos de ordenador. En el sector del software, las empresas expuestas a la demanda de soluciones de digitalización y big data siguen estando sobreponderadas.
La cartera continúa beneficiándose de las operaciones corporativas, a la vista del valor estratégico de muchos negocios tecnológicos más pequeños. También podríamos empezar a ver oportunidades relacionadas con la tecnología de móviles plegables y una nueva fase en la adopción de smartphones. Los servicios de TI son un área que tradicionalmente se ha infraponderado en el fondo, pero muchas de estas empresas ahora están ayudando a otras a digitalizarse y renovar sus sistemas. También existen oportunidades en telecomunicaciones e infraestructuras de telecomunicaciones en relación con el despliegue de las redes 5G.