El aumento de la exposición a renta variable y unas condiciones de mercado que resultaron positivas en términos generales contribuyeron a elevar la rentabilidad de los inversores latinoamericanos y offshore en EE.UU. durante el primer semestre de 2019, de acuerdo con las conclusiones del Barómetro de portafolios de mediados de año de Natixis Investment Managers.
Mauricio Giordano, responsable para México de Natixis IM, comentó a Funds Society que su Barómetro ofrece una visión amplia sobre la forma en la que Asesores Financieros de Latinoamérica y US Offshore están posicionando sus portafolios modelo considerando los entornos cambiantes de mercado. «Por ejemplo, resulta muy interesante ver cómo a pesar de la cautela que expresaban a finales del 2018, los portafolios fueron posicionándose de manera más importante en renta variable, permitiéndoles recuperarse del entorno adverso con el que cerraron el año anterior. El objetivo de nuestro análisis es ofrecer herramientas al mercado que permita tomar mejores decisiones en la construcción de sus portafolios».
1. La bolsa vuelve a un primer plano
Al analizar los 56 portafolios modelo con calificación de riesgo gestionadas por asesores financieros latinoamericanos y offshore estadounidenses, se encontró una mejoría en la confianza en las acciones durante los primeros seis meses de 2019, en claro contraste con las caídas experimentadas a finales de 2018.
En general, los asesores aumentaron el peso medio total de la renta variable de 37% a 43%, registrándose los mayores incrementos en las categorías «Renta variable global» (8,9%) y «Renta variable, otros» (9,5%). La renta variable de EE.UU. (16.8%) siguió siendo la mayor asignación de los asesores, que prefirieron las inversiones en acciones de crecimiento y mixtas, en detrimento de las acciones infravaloradas. Aunque el porcentaje descendió ligeramente con respecto al inicio de año, 83 % de los asesores siguió optando por los fondos de renta variable de gestión activa.
Dentro de la categoría «Renta variable, otros», el consumo cíclico (uno de los mejores sectores del primer semestre) fue la mayor exposición sectorial con un 2,7%, un aumento de más del 2% durante el semestre, que ayudó a incrementar las rentabilidades. Prácticamente todos los portafolios modelo de riesgo moderado se recuperaron de las caídas del 4º trimestre de 2018 y la cartera media superó el modelo de riesgo moderado del Dow Jones.
2. Las asignaciones a renta fija descienden
Las tasas de interés bajas y la recuperación de las bolsas condujeron a los asesores a alejarse de los sectores de la renta fija que se consideran de mayor riesgo. Así, descendieron las asignaciones a renta fija global (-2,2 %) y mercados emergentes (-1,6%) a medida que los asesores se tornaron más cautelosos con el riesgo cambiario. Por el contrario, la renta fija estadounidense registró un incremento general del 14,7 % al 15,6 %, con los mayores aumentos en los fondos de bonos corporativos y de duración más baja. El estudio también destaca la preferencia de los asesores por la gestión activa en el universo de la renta fija; así, esta clase de activos se gestiona activamente en 88%, una tendencia evidenciada por anteriores barómetros.
3. Ligero incremento de los fondos multiactivos
La encuesta también refleja que los asesores recurrieron más a los fondos multiactivos, sobre todo en la categoría «Otros», y que la mayoría de estos productos fueron de sesgo agresivo. Parece que los asesores pudieran haber estado buscando la forma de participar de la mayor fortaleza de los mercados sin entrar de lleno en renta variable y también podrían haber optado por dejar las decisiones de asignación de activos en manos de un gestor multiactivos con experiencia.
Las conclusiones del Barómetro revelan que los asesores empezaron el 2019 con la guardia alta tras las turbulencias experimentadas por los mercados a finales de 2018, aunque las condiciones fueron más favorables de lo previsto. Los inversionistas que asumieron más riesgo bursátil consiguieron los mejores retornos, en claro contraste con 2018. Todas las grandes clases de activos, excepto las divisas y la volatilidad, lograron resultados positivos.
«Las conclusiones del Barómetro nos recuerdan oportunamente que todos tenemos algo que aprender de los diferentes entornos de mercado. Por esta razón, resulta beneficioso que la mayoría de los asesores financieros dediquen tiempo a revisar sus carteras para identificar fuentes de riesgo y rentabilidad y buscar áreas de verdadera diversificación dentro de los portafolios de gestión activa», añade Giordano.