De acuerdo con Geoffroy Goenen, director de Gestión Fundamental de Renta Variable Europea en Candriam Investors Group, de 2014 a 2016, el mercado europeo acumuló un retraso de cerca del 30% con respecto a Estados Unidos. Tan sólo en 2016, más de 100.000 millones de dólares salieron de los fondos de bolsa europea. Sin embargo, es momento para volver al activo.
En opinión del especialista, tras haber gozado de mayor atractivo durante mucho tiempo, «es probable que los mercados estadounidenses hayan agotado la mayor parte de su recorrido alcista a corto plazo, al menos en rendimiento relativo frente a Europa».
Según el experto, Europa es el mercado de renta variable más atractivo por tres razones: sentimiento, fundamentales y squeeze. «Los indicadores económicos y de confianza extremadamente positivos, la reciente disipación de grandes incógnitas políticas, el nuevo auge europeo y la llegada de capitales internacionales a un mercado más estrecho convergen para convertir a Europa en la zona más atractiva para invertir en renta variable», señala Goenen.
Con esto en mente, en Candriam creen que, a corto plazo, las empresas cíclicas serán las primeras beneficiadas de tal apogeo. Mientras que a largo plazo, «las empresas innovadoras y expuestas a las principales tendencias estructurales marcarán la diferencia en cuanto a rentabilidad», concluyen.