Después de que el cierre parcial del gobierno de Estados Unidos, tras 35 días, se suspendiese hasta mediados de este mes, la firma americana Degroof Petercam, ha señalado que aún queda por ver si el Congreso llegará a un acuerdo para cubrir la financiación del famoso muro en la frontera con México. Por otro lado, la firma sostiene que como los funcionarios públicos pronto recibirán el dinero de sus atrasados salariales “el impacto en la econonomía seguirá siendo muy limitado”.
Sin embargo, la firma asegura que no se puede descartar un nuevo «cierre» si las dos partes no logran un punto de entendimiento en la cuestión del muro. “Además, en los próximos meses, los políticos tendrán que abordar el problema de aumentar el techo de la deuda”, aseguran desde la firma.
La economía de los EE.UU. todavía está bien en comparación con la de otras regiones que se están quedando sin vapor
El último informe del mercado laboral indica que en enero se crearon 304.000 nuevos empleos (excluyendo la agricultura). Si bien hay que tener en cuenta que la cifra de diciembre fue revisada fuertemente a la baja, según Degroof Petercam los datos muestran que la situación del mercado laboral sigue siendo sólida y que el cierre “no ha tenido un impacto significativo en la actividad económica”.
Sin embargo, en términos de indicadores adelantados, la confianza del consumidor medida por el Conference Board se redujo a 120,2 puntos (-6.4 puntos) en enero. Para la firma, esta es una disminución mayor a la esperada, probablemente debido en parte al cierre de la administración, aunque es la tercera reducción consecutiva. Los indicadores de PMI muestran una imagen mixta. El PMI de servicios cayó ligeramente de 54,4 a 54,2, mientras que el industrial subió de 53,8 a 54,9.
Este aumento fue confirmado por el indicador ISM de la industria, que también superó las expectativas, subiendo de 54,3 en diciembre a 56,6 en enero. Por lo tanto, según los expertos de la firma, los indicadores adelantados apuntan a una ligera desaceleración en la actividad de EE.UU., pero ciertamente no a un colapso.
En el ámbito empresarial, alrededor de la mitad de las compañías del S&P 500 ya han publicado sus resultados del cuarto trimestre, superando las expectativas, aunque las previsiones se habían revisado considerablemente a la baja en los últimos meses. A principios de octubre, el consenso (registrado por Factset) pronosticó un crecimiento de beneficios del 17,2% para las compañías S&P 500 y, a comienzos de enero esta cifra se había reducido un 11,4%. Hasta ahora, el aumento de los beneficios del cuarto trimestre es del 12,4%.
No obstante, la institución financiera, cree que los resultados son lo suficientemente buenos como para dar apoyo al mercado: “las sorpresas positivas, o incluso negativas, se ven en promedio compensadas por una subida de los precios. Para el primer trimestre de 2019, las empresas que ya han presentados cuentas, casi todas tecnológicas, han reducido sus estimaciones, en su mayoría, a la baja”.
Entre tanto, después de haber revisado sus proyecciones de tipos a la baja y eliminar de su discurso la referencia «un aumento gradual de los tipos», el mercado ha interpretado que la Reserva Federal de EE.UU. optará por una posición de esperar y ver hasta final de año o incluso que reduzca su balance a un ritmo más lento.