Ante el repunte de la volatilidad de las divisas, los inversores en deuda emergente, tanto soberana como crédito, saldrán beneficiados si aplican enfoques activos para gestionar sus inversiones.
Durante gran parte de la última década, el dinero barato de los bancos centrales ha contribuido a suprimir la volatilidad de los mercados, sobre todo en los mercados de divisas. Sin embargo, tras el repunte de la inflación, los bancos centrales han tenido que endurecer considerablemente sus políticas. Como consecuencia, parece que la volatilidad de las divisas va a aumentar y que los mercados sensibles al dólar serán especialmente vulnerables a las fluctuaciones.
Teniendo en cuenta que gran parte de su endeudamiento suele ser en dólares, aunque las obligaciones correspondientes sean en sus propias monedas, los deudores soberanos y corporativos de los mercados emergentes se enfrentan a mares difíciles de navegar.
Esto obliga a los gestores de inversiones a reaccionar con agilidad ante los cambios repentinos de las corrientes y los vientos. La gestión activa de las inversiones adquiere aún más importancia en estas condiciones, afirman Mary-Therese Barton, responsable de renta fija emergente de Pictet Asset Management, y Alain Nsiona Defise, responsable de deuda corporativa emergente.
Artículo escrito por Mary-Therese Barton, Jefa de Renta Fija de Mercados Emergentes de Pictet Asset Management, y Alain Nsiona Defise, Jefe de Mercados Emergentes – Corporativos de Pictet Asset Management.