Tras las recientes bajadas de los tipos de interés, la renta fija parece bien posicionada para vivir otro buen año, según afirma Paul Syms, ETF Head of Fixed Income & Commodities Product Management de Invesco EMEA. El motivo reside en la salida de inversión desde la liquidez hacia todo el espectro de la renta fija. Eso sí, el experto aún confía preferentemente en la parte más conservadora: los bonos gubernamentales y el investment grade. Respecto al oro, aún hay recorrido alcista para este metal precioso, a pesar de los máximos marcados recientemente.
Sólo quedan dos meses para que finalice 2024. Ha sido este el año de la renta fija y se han cumplido las expectativas para este activo?
Tras haber repuntado con fuerza a finales del año pasado, la renta fija empezó el año con el pie izquierdo, ya que los mercados hicieron retroceder las expectativas de recortes de tipos por parte de los principales bancos centrales. Sin embargo, los mercados de renta fija han repuntado con fuerza desde mediados del segundo trimestre y han proporcionado rentabilidades saludables a medida que los bancos centrales se volvían más pesimistas y comenzaban a recortar los tipos. Curiosamente, dada la evolución de las expectativas de tipos, el riesgo de duración ha sido menos importante que el riesgo de crédito, con los mercados de high yield superando al crédito de grado de inversión, que a su vez ha superado a los bonos del estado, y los valores híbridos como los AT1, los valores preferentes y los híbridos corporativos en euros han sido los más rentables. Pero en general, parece que 2024 ha sido un año positivo para la renta fija y las expectativas, hasta la fecha, se han cumplido.
Ya está en marcha un nuevo ciclo de bajadas de los tipos de interés, tanto en Europa como en Estados Unidos. ¿Qué significará esto para la renta fija?
En los últimos meses, los bancos centrales han pasado de aplicar una política monetaria restrictiva para reducir la inflación a recortar los tipos para apoyar el crecimiento económico. Aunque esta senda de recortes de tipos ya ha sido descontada en gran medida por los mercados, el hecho de que los bancos centrales estén flexibilizando su política debería seguir proporcionando un entorno favorable para los mercados de renta fija. Mientras tanto, los rendimientos se mantienen en niveles atractivos y los inversores disponen de grandes cantidades de efectivo a la espera de ser utilizadas, lo que debería llevar a los inversores a recorrer todo el espectro de vencimientos para obtener los rendimientos disponibles en los próximos meses.
En cuanto a la inversión, ¿son adecuados los productos de inversión a vencimiento, o los de larga duración?
El vencimiento o duración más apropiado dentro de los mercados de bonos variará para cada inversor, de forma similar a la preferencia de cada inversor por el riesgo de crédito. Los productos de vencimiento fijo, que combinan las ventajas de invertir en bonos, como tener una fecha de vencimiento fija, con las ventajas de un ETF (diversificación, transparencia, bajo coste, liquidez y bajo tamaño mínimo de negociación) podrían ser adecuados para los inversores que deseen asegurar los rendimientos actualmente disponibles más allá de la curva en lugar de permanecer invertidos en efectivo, donde es probable que los rendimientos disminuyan a medida que los tipos se reduzcan aún más. Por otra parte, los productos de mayor duración serían más adecuados para los inversores con mayor apetito por el riesgo y que potencialmente esperan que los tipos, y por tanto los rendimientos, bajen más de lo que espera actualmente el mercado.
¿Es el momento de asumir riesgos, es el momento de invertir en alto rendimiento y por qué?
Nuestro equipo de asignación de activos recomienda actualmente una posición sobreponderada tanto en deuda pública como en crédito con grado de inversión. La deuda pública es una clase de activos defensiva y la relación riesgo-rentabilidad parece atractiva. El grado de inversión tiene un perfil similar al de la deuda pública. Aunque los diferenciales podrían ampliarse ligeramente desde los actuales niveles relativamente estrechos, los rendimientos son lo suficientemente elevados como para ofrecer rentabilidades atractivas.
¿Qué ocurre con los ETF de oro? ¿Existe potencial alcista dados los recientes máximos históricos registrados por este metal precioso?
Aunque el oro ha alcanzado máximos históricos, sigue habiendo muchas razones para mantener una actitud positiva. La caída de los rendimientos reales y el debilitamiento del dólar estadounidense tienden a ser favorables para los precios del oro, y las perspectivas de los tipos de interés en Estados Unidos indican que ambos factores es posible que concurran en los próximos meses. Además, el oro tiende a beneficiarse de su percepción como clase de activo seguro, ya que es poco probable que las actuales tensiones geopolíticas (conflictos entre Rusia y Ucrania y en Oriente Próximo) terminen pronto. Por último, los bancos centrales han sido grandes compradores de oro este año. Según el Consejo Mundial del Oro, los bancos centrales añadieron 483 toneladas de oro a sus reservas durante el primer semestre de 2024, la mayor demanda en un primer semestre registrada, y un aumento de casi el 5% en comparación con el mismo periodo de 2023.