Los inversores de renta fija en Europa se están replanteando su enfoque ante el aumento de la inflación y la fuerte probabilidad de endurecimiento monetario por parte de los bancos centrales durante este año, según explica el último número de The Cerulli Edge-European Monthly Product Trends.
Si analizamos ambos expertos, observamos que las estimaciones apuntan a que la inflación seguirá aumentando en Europa, al calor del conflicto entre Rusia y Ucrania y ante la subida de las materias primas, en especial, las relacionadas con la energía. “Con unas tasas de inflación significativamente más altas, los riesgos de que haya efectos secundarios también aumentan. Esto implica que el incremento de las expectativas de inflación exija una estrecha vigilancia. En general, está a la espera de las nuevas proyecciones para la reunión de junio. La evolución de las expectativas de inflación determinará la orientación de la política monetaria del BCE en los próximos meses”, advierte Ulrike Kastens, Economist Europe para DWS.
Además, el BCE anunció en su reunión de abril que tiene previsto reducir sus compras de activos en los mercados a 30.000 millones de euros en mayo y 20.000 millones en junio, desde los 40.000 millones actuales. Según señalan desde Edmond de Rothschild AM, la institución monetaria confirmó su intención de poner fin a sus compras en el tercer trimestre y pretende empezar a subir los tipos a partir de entonces.
“Todavía no está claro hasta qué punto la Fed endurecerá aún más los tipos, pero debemos andarnos con cuidado, sobre todo porque los mercados de renta variable no están acostumbrados a una acción radical para normalizar la liquidez. En consecuencia, seguimos infraponderando los bonos soberanos”, explicaban desde la gestora.
Respuestas ante la renta fija
Ante este contexto, ¿qué están haciendo los inversores europeos de renta fija? Desde Cerulli recuerdan que, tradicionalmente, la renta fija ha sido una característica relevante de las asignaciones de los inversores en muchos países europeos. Por ejemplo, el 41,2% de los activos bajo gestión de los gestores locales que operan en Italia a finales de 2021 estaban en fondos de bonos, según la asociación de inversión italiana, Assogestioni. Del mismo modo, los fondos de bonos representaron el 25,2% de los activos gestionados localmente en España el año pasado, según datos de Inverco, frente al 18,3% de los fondos de renta variable.
Sin embargo, 2021 fue un año difícil para los inversores en renta fija tradicional. El índice Bloomberg Barclays Global Aggregate bajó un 4,7% después de haber devuelto un 9,2% en 2020. Esto contrasta con los mercados bursátiles mundiales, donde muchos índices registraron máximos históricos. Por ejemplo, el S&P 500 subió un 26,9% y el FTSE All-Share y el MSCI Europe ex-UK subieron un 14,6% y un 25,4% respectivamente.
En respuesta, los inversores en renta fija han recalibrado la brújula de sus asignaciones a productos de renta fija. “Las estrategias que han visto aumentar el interés de los inversores y los activos bajo gestión incluyen enfoques de duración más corta, deuda de alto rendimiento, vinculados a la inflación y basados en el extranjero, especialmente en Asia. Asimismo, está aumentando la demanda de estrategias capaces de replicar la estabilidad de los flujos de caja asociados a los productos de renta fija, como los bienes inmuebles y las infraestructuras”, indica Fabrizio Zumbo, director de análisis de gestión de activos y patrimonios europeos de Cerulli Associates.
Por otro lado, los inversores en renta fija también han intentado buscar una asignación geográfica más amplia, pero esto ha tenido una suerte desigual, según Cerulli. Por ejemplo, a los que invierten en China y en Asia en general les fue razonablemente bien en 2021. En cambio, los productos que ofrecen exposición a los mercados emergentes europeos, por ejemplo los bonos soberanos emitidos en Polonia, la República Checa, Hungría y Rumanía, han sufrido.
Por último, algunos inversores están mirando más allá de las clases de activos tradicionales. «La base de clientes de renta fija, incluso en los mercados más conservadores, como Italia y España, ha mostrado un creciente interés por las oportunidades del mercado alternativo, por ejemplo en el sector inmobiliario o las infraestructuras», añade Zumbo.
Cerulli espera que el actual clima de mercado siga impulsando la innovación de productos, ya que los inversores están más acostumbrados a probar cosas nuevas para generar mejores rendimientos.