NN Investment Partners (NN IP) acaba de lanzar un nuevo fondo de bonos verdes que estará disponible en numerosos mercados, lo que le permitirá ampliar el alcance de su estrategia NN (L) Green Bond, pero con una duración más corta: en concreto, de dos años. Según la gestora, otros fondos de este tipo que ya se encuentran en el mercado tienen una sensibilidad a los tipos de interés de al menos cinco años, lo que hace que el suyo se encuentre “en una posición única”.
“Dada su menor duración, creemos que el fondo es perfecto para aquellos inversores que quieren proteger sus carteras frente a unos tipos de interés en aumento y, al mismo tiempo, actuar de forma urgente frente al cambio climático”, asegura NN IP.
Asimismo, recuerda que los bonos verdes son instrumentos que se destinan a financiar proyectos nuevos o ya existentes que tienen un impacto positivo medible en el medioambiente y que contribuyen al cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas. “Creemos que invertir en bonos verdes es particularmente atractivo en el entorno de mercado actual”, asegura la gestora.
En ese sentido, apunta que los tipos de interés en Europa están cerca de sus niveles más bajos en los últimos cinco años y los spreads de los bonos verdes en euros se encuentran relativamente altos en comparación a la media de ese mismo periodo. Por ello, insiste en que es el momento oportuno para que los inversores aumenten su exposición a este tipo de fondos.
“Para aquellos inversores que quieren priorizar la sostenibilidad, la inversión de impacto (incluyendo la de bonos verdes) es la mejor elección en inversión responsable, ya que hay evidencia cualitativa y cuantitativa de que contribuye al bienestar global”, asegura Bram Bos, gestor principal de bonos verdes en NN IP.
Además, destaca que los inversores no afrontan ningún coste adicional a la hora de invertir en bonos verdes, sino que, de hecho, esta asignación les permite reducir la huella de carbono de sus carteras de renta fija y disfrutar de mejor gobernanza y mayor transparencia. Todo ello “sin sacrificar liquidez ni retornos”, afirma.
NN IP es el mayor participante del mercado en términos de fondos verdes abiertos y está cerca de alcanzar el objetivo de los 1.000 millones de euros. En este tiempo, la gestora asegura que su NN (L) Green Bond Fund ha obtenido fuertes retornos y destaca que se ubica en el decil más alto de su sector. Además, desde su concepción, su desempeño anualizado ha superado su índice de referencia en un 0,6% (un 2,32% para el fondo, frente al 1,65% del índice, según cifras de febrero de 2019).
Además, ofrece beneficios medibles tanto para el medioambiente como para la sociedad: las emisiones de CO2 que se evitan con la inversión de un millón de euros equivalen a la emisión media anual de 235 coches de pasajeros, mientras que el aumento de la capacidad de las energías renovables equivale al trabajo de 63 aerogeneradores.
NN IP ve numerosas razones para que, durante los próximos años, los inversores se inclinen por la inversión de impacto y, en concreto, por las soluciones de bonos verdes. En la actual fase del ciclo, este nuevo fondo de corta duración “generará una oportunidad de inversión para quienes busquen permanecer protegidos ante posibles subidas de tipos y, al mismo tiempo, beneficiarse de spreads atractivos”.
Además, en el Foro Político de Alto Nivel sobre el Desarrollo Sostenible que tendrá lugar el próximo septiembre, las Naciones Unidas analizarán el progreso que ha habido en relación a los Objetivos de Desarrollo Sostenible, dirigiendo la atención a aquellos aspectos que, según la gestora, abordan sus fondos de bonos verdes.
“A medida que el mundo en el que vivimos pase a estar incluso más conectado y los inversores puedan saber más fácilmente a dónde va su dinero, creemos que la inversión en bonos verdes generará cada vez más oportunidades”, sentencia NN IP.