El contexto es favorable para la inversión en renta variable desde una perspectiva value puesto que el entorno de recuperación económica en Europa, junto a la reducción de la incertidumbre política y macroeconómica y el aumento de los tipos de interés, deberían dar un giro a la situación y resultar beneficiosos para este estilo de inversión. Así lo explica Richard Halle, gestor del M&G European Strategic Value Fund, en esta entrevista con Funds Society.
¿Cuáles son los principales argumentos a favor de la inversión en acciones europeas?
En nuestra opinión, las acciones europeas presentan un valor atractivo, tanto en términos absolutos como relativos, y especialmente cuando las comparamos con las acciones estadounidenses. Además, las empresas europeas deberían beneficiarse de la recuperación económica de la región, que debería apoyar el crecimiento de las ganancias. El crecimiento económico ha aumentado, las tasas de desempleo han caído en la eurozona y la inflación ha comenzado a subir. El Banco Central Europeo, sin duda, ha proporcionado el apoyo necesario para reactivar la zona del euro y los inversores están ahora centrados en cómo se desarrollará la retirada de los estímulos.
Al aplicar un enfoque de inversión value ¿cómo de fácil (o difícil) es encontrar empresas infravaloradas en Europa?
Las valoraciones en el mercado han aumentado este año, pero sigue habiendo oportunidades atractivas para inversores value que quieran ser selectivos. Como decíamos, las acciones de este tipo nos parecen atractivas tanto en términos relativos como absolutos y lo cierto es que hemos identificado oportunidades de inversión en prácticamente todos los sectores del mercado.
En los últimos años las estrategias value han quedado fuera de las preferencias de los inversores, que han favorecido en su mayoría activos growth que proporcionaran beneficios fiables y valores que ofreciesen un flujo de ingresos constante. El resurgir del estilo value que vimos en 2016 demostró ser transitorio y en 2017 parece que los inversores vuelven a optar por los activos con sesgo growth. Como resultado de este prolongado bajo rendimiento, la brecha de valoración que vemos actualmente entre las acciones value y growth es prácticamente más amplia que nunca. Si esta brecha se estrechara, creemos que los potenciales beneficios serían significativos.
¿Es necesario mantener liquidez en caso de que surjan mejores oportunidades?
Sin duda. Como inversores value siempre estamos buscando compañías infravaloradas que supongan una buena oportunidad, así que siempre tendemos a mantener un nivel ligeramente elevado de efectivo en la cartera. Esto nos permite aprovechar la volatilidad a corto plazo y los títulos infravalorados en beneficio de nuestros clientes.
¿Cuál es el upside potencial de su cartera en este momento? Con el reciente rally del mercado de valores… ¿ha disminuido esta cifra?
Creemos que las perspectivas de muchas de las acciones que tenemos actualmente en cartera están significativamente infravaloradas. Es cierto que, a medida que los inversores han ido recuperando su confianza en el crecimiento europeo, hemos visto muy buenos resultados de la parte cíclica de nuestra cartera, pero aun así seguimos teniendo acciones “baratas” cuya valoración no creemos que sea correcta.
En términos de valoración, el fondo cotiza a un descuento significativo con respecto al índice MSCI Europe (tanto en ratios de precio/beneficio como precio/valor contable).
¿Está esperando una corrección de mercado a medio o largo plazo que pueda beneficiar a su estrategia?
En los últimos años, los activos value han registrado rentabilidades más débiles empujadas por la búsqueda de estrategias defensivas por parte de los inversores en un contexto de incertidumbre, volatilidad y tipos de interés muy bajos. Creemos que, en adelante, el contexto de recuperación económica en Europa, junto a la reducción de la incertidumbre política y macroeconómica y el aumento de los tipos de interés, deberían dar un giro a esta situación y resultar beneficiosos para el estilo value.
¿Cómo aprovechan los episodios de volatilidad en su estrategia de gestión, como por ejemplo los episodios electorales?
Como inversores a largo plazo, vemos la incertidumbre y la volatilidad como oportunidades de inversión, no es algo que temamos. Cuando son las emociones y no los fundamentales las que impulsan los movimientos del mercado, las valoraciones son a menudo erróneas.
¿Cómo posiciona su fondo ahora? ¿Qué sectores sobrepondera y por qué?
En realidad la asignación entre sectores es resultado de la selección individual de las acciones que tenemos en cartera, más que un reflejo de nuestra visión sobre los mismos. Tampoco tenemos acciones de convicción. Ninguna acción individual en cartera puede tener un peso superior al 3% en relación con el MSCI Europe. Como fondo value, esperamos que el motor de rentabilidad sea la estrategia y no las convicciones sobre sectores o compañías concretas.
Dicho esto, últimamente nos hemos estado enfocado en localizar oportunidades en compañías llamadas a beneficiarse del crecimiento en Europa y de la mejora en las perspectivas económicas de la zona. Dentro de los valores cíclicos, hemos incorporado firmas como Bilfinger, una compañía alemana de ingeniería y construcción o Randstad, una firma holandesa del reclutamiento. También hemos invertido en Wereldhave, una empresa inmobiliaria holandesa que invierte en centros comerciales.
A nivel sectorial estamos sobreponderados en los sectores de consumo, industria y energía e infraponderados en bienes básicos (que consideramos caros debido al creciente protagonismo que han tenido las acciones defensivas en el último periodo), financiero y materiales.
Incluso aunque estemos por debajo del índice en cuanto a la exposición al sector de materiales, hemos iniciado posiciones en los productores de acero inoxidable Aperam y Outokumpu, los cuales creemos que presentan perspectivas atractivas dada la potencial demanda de acero.
Sector financiero: muchos gestores de fondos siguen manteniéndose al margen. ¿Siguen la misma estrategia o no?
En nuestro caso estamos infraponderados en el sector financiero, principalmente debido al nivel de infraponderación que presentamos en el sector asegurado. Creemos que el entorno actual hace difícil que las empresas de este sector puedan aumentar sus ganancias. Sin embargo, hemos estado invirtiendo en acciones bancarias individuales últimamente. Por ejemplo, tenemos una participación en Bank of Ireland, que creemos que se encuentra bien posicionada para beneficiarse de la mejora de la situación económica en este país. También hemos incorporado a nuestra cartera a Erste Bank, el banco más grande de Austria. Su valoración nos parece atractiva ya que el banco ha reforzado su balance recientemente y creemos que presumiblemente está bien posicionado para beneficiarse del crecimiento económico en Europa.