La rotación típica de las carteras de Magallanes Value Investors, entendida como el importe total de compras y ventas al año en comparación al patrimonio gestionado, es baja, generalmente no superior al 20%. Esto es acorde con su período medio de permanencia en las inversiones, que suele situarse en alrededor de cinco años. Por lo tanto, tras unos años de andadura, “tiene sentido que durante nuestro tercer año de mandato algunas de las inversiones en cartera hayan alcanzado el punto óptimo de maduración para ser sustituidas por otras”, explica Iván Martín, director de Inversiones de Magallanes Value Investors, en su última carta trimestral, en la que indica cómo están teniendo «un repunte notable» en el número de transacciones realizadas en los fondos.
Las rotaciones se han acentuado en su cartera en los últimos meses: “Parte importante de las ventas se iniciaron a finales del segundo trimestre y han continuado durante el mes de julio”, añade. En cuanto a los cambios en el segundo trimestre del año, entre las incorporaciones destaca novedades interesantes, que reúnen las características propias de una inversión “estilo Magallanes”: empresas baratas, fuera de moda y cotizando, muchas de ellas, en mínimos históricos, explica en su carta.
“Queso, mantequilla, barcos, fertilizantes y coches, todo es la misma cosa. Después de casi dos décadas de profesión no deja de sorprenderme el comportamiento pendular de los mercados financieros, la rapidez con la que se pasa de la avaricia al miedo y del miedo a la avaricia sin apenas reposar por unos segundos en el punto de equilibrio”, explica Martín.
Sobre la mantequilla y sus altos precios, explica que una de sus mayores posiciones es la empresa francesa de elaborados lácteos Savencia, líder en la producción y distribución de mantequillas y quesos a nivel mundial. “Justo hace un año explicábamos dicha compra en la carta del segundo trimestre de 2016. Entonces, los precios de la mantequilla y otros elaborados lácteos como el queso, no estaban en máximos, de hecho, estaban en mínimos. Apenas 12 meses después la situación es bien distinta, y además, tanto China como Rusia han empezado a incrementar importaciones. El resultado es sencillo: menor oferta y mayor demanda implica precios altos. Savencia, entre otros elaboradores lácteos, es un claro beneficiario de esta situación, lo que se está traduciendo en mayores márgenes y rentabilidad del negocio”, explica.
Esta situación no sólo se ha producido en el sector de elaborados lácteos, sino también, en otros tan dispares como el de barcos, fertilizantes y coches. “En cuanto a barcos, hemos encontrado ideas muy interesantes en el nicho de buques de transporte de productos refinados del petróleo, conocidos en el argot naviero como product tankers. A diferencia de los buques de crudo, conocidos como tankers, que transportan el petróleo desde los pozos de extracción a las refinerías, los product tankers transportan productos refinados como gasolinas, diéseles y otros combustibles hasta su punto de consumo”, explica. Han comprado comprado el mayor especialista en product tankers del mundo con 124 barcos operados y en propiedad, Scorpio Tankers, basada en Mónaco y cotizada en Estados Unidos.
Algo parecido ha ocurrido en el sector de fertilizantes, donde la firma ha comprado Potash Corp, líder mundial en la producción de potasio con una cuota de mercado del 22%. También produce nitrógeno y fósforo, con un 2% y 3% de cuota mundial respectivamente.
La industria del automóvil en Europa también ofrece oportunidades de inversión poco usuales en un entorno de mercados en máximos históricos, dice Martín: “Posiblemente algunos de los fabricantes europeos de coches que hemos analizado y comprado recientemente estén entre las ideas de inversión en valor más baratas que hemos encontrado en los últimos años”.
En cuanto a bancos, siguen fuera: “En ocasiones nos preguntan por qué no compramos bancos si nuestro estilo de gestión hace que nos fijemos en lo “más feo”. Es cierto que el sector bancario ha sido uno de los peores en comportamiento de los últimos años, con pérdidas importantes por el camino, como la resolución de Banco Popular el pasado 6 de junio. El resto de la banca española, excluyendo los dos grandes bancos globales, es aún difícil de digerir. Se hace complicado invertir en negocios con una naturaleza de apalancamiento tan elevada, especialmente cuando algunos de estos bancos tienen un nivel de inversión en bonos de gobierno tan desproporcionado que llega a multiplicar en varias veces el tamaño de sus fondos propios”, explica Martín.
Actividades
La firma, dentro de su labor divulgativa, ha puesto a disposición de los inversores en su página web una recopilación de los 100 libros indispensables sobre la filosofía value para que aquellos que lo deseen puedan consultarla. La gestora ya cuenta con unos 10.000 inversores.