El U.S. Dollar Index cayó por debajo de 100 la semana pasada, en respuesta a la posibilidad de que el descenso de la inflación en EE. UU. reduzca las expectativas de subidas de tipos y en un contexto en el que el repunte de la renta variable mermó la demanda de activos refugio. Una situación que traerá pros y contras, según un análisis de la plataforma de inversión eToro.
“El U.S. Dollar Index, en el que predomina el euro, ha caído un 12% desde su máximo de 20 años alcanzado en septiembre, mientras que el índice más amplio ha perdido un 9%. Las divisas de Latinoamérica y Europa del Este han liderado las ganancias este año, dadas sus tempranas subidas de tipos, mientras que el euro ha superado el nivel de 1,10. El yen japonés y el yuan chino han sido dos de las monedas que más han perdido, al ser las que más han subido los tipos de interés. Vemos un dólar ligeramente más débil en el futuro, lo que favorece a los activos de riesgo, pero con algunos costes para los mercados exportadores europeos y asiáticos más expuestos”, explican desde la firma.
Como aspecto positivo de esta situación se encuentra, según la firma, se ha visto en el reciente repunte tanto de los mercados emergentes como de las materias primas, «dos de los activos que más han sufrido este año», y en la mayor fortaleza de la tecnología, según el informe. «La debilidad del dólar suele ayudar a las acciones de los mercados emergentes, al aliviar las presiones sobre la financiación y la deuda en dólares. También a las materias primas, que cotizan en dólares y se abaratan para los compradores extranjeros», prosiguen. Mientras que los sectores estadounidenses con grandes ingresos en el extranjero, como tecnologías de la información, con un 58% de ventas procedentes del extranjero, se vuelven más competitivos.
Sin embargo, la debilidad del dólar también tiene cono posible efecto en contra un hipotético impulso dela inflación estadounidense, al menos modesto, «al aumentar el coste de los bienes importados e invertir la reciente tendencia de caída de los precios».
“Las oscilaciones de las divisas afectan especialmente a las economías que se centran mucho en el comercio. Y aquellos mercados cuyas empresas hacen muchos negocios en el extranjero. Las más expuestas a perder competitividad por la debilidad del dólar son las economías y bolsas «abiertas» de Asia y Europa, encabezadas por Hong Kong, Singapur, Países Bajos y Suiza», señalan en eToro.
Por el contrario, en la firma reseñan que «las mayores economías y mercados bursátiles del mundo, como EE.UU., China, Japón e India, son más «cerrados». Pero incluso aquí los efectos pueden ser significativos. La debilidad del dólar ya observada podría dar un impulso del 3% a los ingresos de las empresas de EE.UU., algo grande en el contexto de las ventas planas registradas este trimestre”.
Ben Laidler, estratega de mercados globales de la plataforma de inversión en multiactivos eToro, ha comentado que la debilidad del dólar estadounidense «se ha visto claramente en el reciente repunte tanto de los mercados emergentes como de las materias primas, dos de los activos que más han sufrido este año, y en la mayor fortaleza de la tecnología».