“Los activos de mayor riesgo rendirán menos ya que los mercados financieros alcanzarán la mayoría de edad”, esta es la principal conclusión que destacan desde Robeco en su informe Expected Returns 2018-2022, en el que pronostica que las acciones de mercados desarrollados generarán una media del 5% anual, inferior a la previsión del 6,5% de la anterior edición 2017-2021.
Según explica Lukas Daalder, jefe de inversiones de Robeco, en este documento, la gestora ha revisado a la baja sus expectativas para la renta variable de mercados emergentes, proyectando unas ganancias anuales del 6,25%, frente al 7,25% anterior.
“Respecto a la deuda pública, somos menos pesimistas. Para los próximos cinco años prevemos que el bono alemán a 10 años de referencia genere unos rendimientos del -2,5%, ligeramente mejores, o menos malos, que el -3,5% que anteriormente pronosticábamos para esta clase de activo. Conforme aumenta el atractivo relativo de la deuda con rating AAA, pensamos que lo contrario es aplicable a la deuda sin categoría de inversión: para la deuda de alto rendimiento prevemos unos rendimientos del 0,25% durante los próximos diez años, muy inferiores al 1,0% de nuestro anterior examen”, explica Daalder.
Respecto a las inversiones alternativas, la gestora reitera su posición: las materias primas deberían rendir un 2,75% anual en el próximo período, aunque la inversión inmobiliaria indirecta rendirá algo menos, con rendimientos del 4,25% frente al 5,0% del último pronóstico. Respecto al efectivo –la referencia frente a la que el resto de rendimientos de inversión se comparan– la firma prevé un rendimiento del 0,5%.
“Si nos fijamos en las distintas tendencias que prevemos den forma a los mercados financieros en los próximos cinco años, parece que la de alcanzar la mayoría de edad es uno de los temas recurrentes. En sentido estricto, por mayoría de edad se entiende que es hacerse adulto, pero se interpreta en general como el inicio de una nueva etapa, la siguiente fase en una evolución continuada. En este sentido más general, en los últimos años y décadas hemos asistido a muchos fenómenos que están ahora a punto de iniciar una nueva etapa, lo que podría tener, en el futuro, importantes consecuencias para los mercados financieros”, afirma Daalder.
¿Tendrá éxito el QT?
Daalder señala que el factor más determinante se producirá cuando los bancos centrales empiecen a deshacer la QE con una nueva estrategia: el endurecimiento cuantitativo (Quantitative Tightening o QT).
Según explica este experto, los programas de estímulo que empezaron como antídoto contra la gran recesión y la crisis financiera mundial hace una década alumbraron una época sin precedentes de tipos de interés históricamente bajos –e incluso negativos–, que se sumaron a una compra de bonos por los bancos centrales de 72.000 millones de dólares (7,2 bn de dólares). Pero, ¿qué va a pasar en los mercados financieros cuando los bancos centrales empiecen a revertir dicho proceso?
“En conjunto, hemos rebajado nuestras perspectivas para la mayoría de los activos, y anticipamos volatilidad en el futuro. Esto suena peor de lo que en realidad es: los rendimientos ponderados de una cartera bien diversificada solo se reducirán ligeramente”, explica.
Respecto a la situación global, las perspectivas del escenario económico base son nuevamente de recuperación continuada, pero con mayores probabilidades de que la economía mundial sufra una moderada recesión durante los próximos cinco años. Los principales cambios afectan a otros dos escenarios menos probables: uno de estancamiento u otro de crecimiento sorprendentemente intenso.
La firma apuesta por una normalización escalonada y continuada (60% de probabilidad), por lo que “las probabilidades de un estancamiento secular se han reducido del 30% al 20%. Igualmente, las perspectivas de un escenario de alto crecimiento, caracterizado por una dinámica de expansión y contracción basada en la deuda, han sido incrementadas del 10% al 20%”, concluye Daalder.